Desconcierto, un síntoma del panorama político que afecta a todos y todas

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Los autores destacaban para este año plagado de elecciones: "Antes de que las dos grandes coaliciones pongan en juego su capacidad de organizar el debate y buena parte de las pasiones de la sociedad argentina, conviene repasar qué tiene esta en la cabeza, cuáles son sus ideas respecto de los principales temas de la agenda pública, constatar cuáles de ellos son divisivos y si, verdaderamente, las divisiones siguen las coordenadas de la polarización electoral”.

Para alcanzar algunas conclusiones, realizaron un estudio mixto basado en encuestas y grupos focales. Según Kessler y Vommaro, queda claro que “la sociedad argentina está polarizada”.

“Esta división política está vinculada con un reagrupamiento ideológico, probablemente guiado por la conformación de dos grandes coaliciones electorales a partir de 2015: Frente de Todos (FdT) y Juntos por el Cambio (JxC)”, destacaron. “Ambas coaliciones organizan posiciones opuestas en temas centrales de la agenda. Sin embargo, esta polarización tiene sus límites. En primer lugar, no todas las agendas están igualmente polarizadas: hay temas para los cuales las opiniones están más divididas que otras. En segundo lugar, existen diferencias significativas en el interior de estas dos coaliciones, entre personas que apoyan a uno u otro de los principales líderes de cada agrupación. Y, aun si el voto en 2019 es un buen predictor, más lo es la adhesión a las figuras clave de ambas coaliciones en 2023”, agregaron.

En este marco, elaboraron un ranking de los temas que más polarizan a la sociedad argentina.

La polarización no es un invento argentino

Según el proyecto “The Hidden Drug” (La Droga Oculta), la polarización se ha convertido en una de las grandes amenazas del siglo XXI. Solo en los últimos 5 años, este fenómeno que genera división, enfado y enfrentamiento en la sociedad ha crecido hasta el 40 %.

Mariano Sigman es un prestigioso neurocientífico argentino y autor de El poder de las palabras. Entrevistado para este proyecto, analiza qué se pone en juego en nuestro cerebro cuando hablamos desde uno de los lados del arco polarizado.

“Cuando una persona tiene una polarización ideológica y, por lo tanto, está muy convencida de una idea, esa convicción no solo genera miopía, sino que se traslada al mundo de las emociones. En general, deviniendo o llevando a estados de ira o estados de gran enfado. Es muy conocido por la ciencia y un montón de estudios muestran que una persona en un estado de ira toma decisiones que son nocivas para sí misma y decisiones que son nocivas para el resto también”.

Para la consultora LLYC, que realizó el estudio "The Hidden Drug" en 2022, la polarización provoca que, del mismo modo que la toma de decisiones bajo las drogas no es la idónea, tampoco lo es bajo los efectos de la polarización. Mientras tanto, la agencia Edelman también se propuso indagar sobre este fenómeno que acapara los debates políticos mundiales y realizó un reporte global llamado “Navegando un mundo polarizado”, que fue difundido a principios de 2023.

Para este análisis, que abarcó a más de 32.000 encuestados y encuestadas de 28 países, “la falta de fe en las instituciones sociales provocada por la ansiedad económica, la desinformación, la división de clases masivas y la falta de liderazgo nos han llevado a donde estamos hoy: profunda y peligrosamente polarizados”.

En el reporte, Argentina ocupa el primer lugar cuando se habla de “polarización severa”. Encabeza ese listado por arriba de Colombia, Estados Unidos, España, Sudáfrica y Suecia. En el cuadrante de países con “polarización severa”, el agravante es que un alto porcentaje de las personas encuestadas percibe divisiones profundas y “no cree que puedan superarse”.

 Imagen: Argentina está al tope de los países que se observan muy divididos y "atrincherados", sin poder de superar la división

Bronca

Según una encuesta realizada en mayo por el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag), tras un estudio presencial de 2002 casos para consultar sobre la “situación actual del país”, la respuesta mayoritaria (el 24,5 %) fue “me da bronca”. Las valoraciones negativas parecen no ser noticia en cuanto a la percepción de la actualidad en Argentina, donde se suman emociones como la decepción y la incertidumbre.

En las elecciones PASO para los departamentos de Mendoza que adelantaron sus elecciones para las categorías comunales, llamó la atención el porcentaje de votos nulos que se registraron en comparación con el sistema de boleta única papel, que rondó el 8 %, que llegó a superar el promedio histórico. En ese momento, el gobernador Rodolfo Suarez dijo al respecto: “A veces, el voto nulo es un voto bronca”.

En las PASO provinciales, donde se dirimían las categorías de candidatos y candidatas a gobernador y legisladores provinciales, el porcentaje no bajó mucho más y se mantuvo alto. Incluso, si se suman los votos nulos y los emitidos en blanco, llegan al 12 %. Al mismo tiempo, fue baja en relación con el promedio la cantidad de electores y electoras que se acercaron a votar: apenas el 66,32 % del padrón.

Así, la emoción entendida como "bronca" con la situación del país pareciera tener una línea directa con la participación ciudadana en los comicios (al menos en Mendoza), cuyo plato fuerte será en las elecciones generales de octubre, cuando se elija a la persona que se hará cargo de la presidencia.

¿Salir de la polarización?

Hay abundante bibliografía sobre lo que denominamos “grieta” y no ahondaremos en los orígenes de este concepto que pareciera englobar todo debate público. De todas maneras, un reciente estudio del Observatorio Pulsar.UBA, que tiene por objetivo comprender de manera sistemática los valores sociales y las cosmovisiones de las y los argentinos, deja un dato esperanzador, ya que, “en tiempos en los que la polarización tamiza todo y los acuerdos políticos no tienen conducción, hay un 70 % de los entrevistados que responde con convicciones y compromisos democráticos. La sociedad quiere democracia”.

Asimismo, rescatamos algunas de las conclusiones a las que llegaron Kessler y Vommaro. Para los sociólogos, ”existen temas de consenso intercoaliciones, en particular aquellos ligados al género, sobre todo en torno a los derechos LGBT. El aborto, al igual que en casi todo el mundo, sigue generando un importante rechazo en varios sectores, aunque, al menos hasta ahora, no se trata de un rechazo que lleve actualmente a una militancia contra la ley vigente. De todos modos, la experiencia internacional reciente señala que conviene ser prudentes”.

Por otra parte, y para concluir, el estudio de Fundar destaca: “Hay temas de considerable importancia estratégica, como la cuestión ambiental y la explotación de recursos mineros, que, si bien generan protestas y movilizaciones, por el momento no han adquirido saliencia como temas divisivos a nivel de la opinión pública. Esto se debe, según los autores, a que ninguna de las dos coaliciones motoriza monolíticamente un diferendo al respecto, lo cual abre una oportunidad para hallar consensos”.