En una jornada marcada por graves hechos de violencia, con varios heridos en distintos episodios, decenas de urnas quemadas y denuncias sobre presuntas irregularidades, el candidato del Frente para la Victoria, Juan Manzur, confiaba anoche en alcanzar un triunfo que le permita continuar con el proyecto iniciado en 2003 por su mentor, José Alperovich.

En tanto, en el búnker del opositor José Cano, postulante del Acuerdo para el Bicentenario, en el que confluyen radicales, macristas, massistas y peronistas de izquierda, manejaban cifras extraoficiales que les aseguraban una victoria, con una ventaja importante en la capital, que concentra más del 65 % del padrón provincial.

Más de 25 mil candidatos se preparaban para desvelarse esperando los resultados que definirán quiénes ocuparán los 347 cargos en juego, incluidos gobernador, vicegobernador, 49 legisladores, 19 intendentes, 184 concejales y 93 delegados comunales. El recuento de votos se realizaba de manera llamativamente lenta, y recién pasadas las 22 se comenzaron a cargar los primeros datos oficiales, que mostraban una ventaja a favor de Manzur, cuya fortaleza electoral radica en el interior. Con el 1,30 % de las mesas escrutadas, el oficialista obtenía 8000 votos (77 %) contra 2000 (20 %) del espacio encabezado por el radical Cano. Sin embargo, en ninguno de los frentes se animaban a cantar victoria en unos comicios en los que, según informó la junta electoral provincial, votó más del 80 % del padrón.

Al cierre de esta edición, Manzur minimizó el escándalo, al hablar de "casos puntuales" de violencia, a la vez que se adjudicó la victoria. Su rival, Cano, reclamó, en cambio, a la justicia electoral provincial la suspensión provisoria del escrutinio y la apertura de las urnas para garantizar la transparencia de la elección. A su lado, Mauricio Macri, presente en el búnker opositor junto al líder radical Ernesto Sanz, le pidió al gobernador Alperovich que asegure "la paz" a los tucumanos.

La elección se vio empañada por hechos de violencia extrema, que incluyeron el incendio de una treintena de urnas en el interior y el ataque a balazos contra dos sedes de la oposición en la capital. El episodio más grave tuvo lugar anoche en la localidad de San Pablo, distante unos 15 kilómetros al sur de San Miguel de Tucumán, donde fueron incendiadas 27 urnas en dos escuelas. Según informó la policía, unas 400 personas que respondían a los candidatos peronistas José Carmona y Daniel Castro, quienes pugnaban por el cargo de delegado comunal, ingresaron a los establecimientos cuando se realizaba el escrutinio, provocaron destrozos y prendieron fuego las urnas. Los autores de los desmanes se enfrentaron con los efectivos que custodiaban el desarrollo de los comicios y un gendarme terminó con una herida en la cabeza, por lo que debió ser hospitalizado. Además, 13 civiles resultaron heridos.

Por la mañana, una situación similar se registró en la comuna de Sargento Moya, 45 kilómetros al sur de la capital, donde fueron quemadas las dos urnas en las que estaban habilitadas para votar 558 personas, lo que obligó a suspender la elección. Por el hecho fueron detenidos tres sospechosos, entre ellos Hugo Alarcón, candidato a delegado comunal de esa localidad por el opositor Acuerdo para el Bicentenario.

Por otro lado, desde el frente opositor denunciaron que fueron atacadas a balazos dos sedes partidarias pertenecientes a candidatos de ese espacio en la zona noroeste de la capital provincial. Los autores de los disparos se movilizaban en una motocicleta, según las denuncias que fueron asentadas en la Seccional 5.

En otro episodio violento, el camarógrafo Jorge Ahualli, quien trabaja en el cable local CCC, fue atacado a golpes por un grupo de punteros identificados con candidatos del oficialismo cuando los filmaba repartiendo bolsones con mercadería. Por el hecho fueron aprehendidos dos sospechosos. Al cierre de esta edición, un numeroso grupo de militantes del Acuerdo para el Bicentenario protestaba al frente de la sede del Correo Argentino para reclamar transparencia en los comicios.

Según los fiscales de la oposición, entre otras irregularidades, detectaron que en toda la provincia hubo voto cadena, boletas adulteradas, casos de personas fallecidas que figuraban en los padrones y una innumerable cantidad de testimonios de personas que se presentaban a votar y descubrían que alguien ya lo había hecho antes en su lugar.

En la escuela Alfredo Cosson, del barrio Ejército Argentino, en la zona sur de esta capital, un fiscal opositor descubrió que una urna ya contenía votos del oficialismo en su interior antes de comenzar la elección. En las redes sociales, se multiplicaron las denuncias sobre presuntas maniobras irregulares cometidas por el oficialismo para volcar el resultado de la elección en favor de Manzur. En Twitter fue tendencia nacional el hashtag #FraudeEnTucuman.