Chango Cárdenas nació el 25 de julio de 1945 en Santiago del Estero. Es recordado y amado por todos los hinchas de Racing porque fue el autor del gol que le dio la primera Copa Intercontinental a un equipo argentino. Allá por 1967 en el tercer partido de la serie contra el Celtic, “El Chango”, luego de una jugada colectiva tomó la pelota en tres cuartos de cancha, la trasladó tres metros y sacó un zurdazo que se terminó metiendo en el ángulo izquierdo del arquero John Fallon y le dio la victoria al entonces llamado “Equipo de José”, apodado así porque su director técnico era Juan José Pizzuti, que venía de coronarse en el campeonato argentino de 1966 con una campaña extraordinaria.

El goleador santiagueño comenzó su carrera futbolística jugando en su adolescencia en Unión de Santiago del Estero. Fue allí donde Cárdenas fue descubierto en 1962 por Racing Club, llegó a Capital Federal con 16 años y tuvo un encuentro con el histórico y estudioso Carlos Peucelle. “Tuve la suerte de hablar con él y para mí fue un honor hablar con un jugador de su talla. Más aún cuando yo recién había llegado a Buenos Aires”, indicó el Chango en una de tantas entrevistas, donde también detalló: “Me dijo pibe de qué juega, a lo que le contesté que, de delantero, de nueve. Entonces me dice que para ser titular en un equipo debía ser ambidiestro. Eso me quedó grabado para siempre, y mirá como fue la historia”. Claramente fue uno de los mejores consejos que recibió el jugador norteño.

Su llegada tempranera al club de Avellaneda hizo que el goleador fuese cedido a la primera "B" de Argentina con Nueva Chicago, antes de unirse a Racing definitivamente en 1964.

Comenzó a escribir su historia grande en la Academia en 1966 cuando fue parte del equipo ganador del Campeonato Argentino. Luego en 1967 ayudó al equipo a ganar la Copa Libertadores de América. Ese mismo año marcó el gol de la victoria en el 2-1 en Buenos Aires para igualar la serie contra Celtic FC en la Copa Intercontinental y además anotó el único gol en el partido de desempate realizado en el Estadio Centenario en Montevideo, Uruguay, en donde con un zurdazo inmortalizado estampó el 1-0 definitivo para hacer a Racing Club el primer equipo argentino en convertirse en campeón del mundo. Este partido de desempate fue conocido como "La Batalla de Montevideo".

Luego de coronarse en Racing y marcar una década, a partir de 1972 desplegó su fútbol por México donde permaneció dos años en Puebla y uno y medio en el Veracruz. Pero siempre se vuelve al primer amor; y el “Chango” regresó a la Academia en el campeonato Nacional de 1976, donde jugó tan solo hasta la novena fecha para despedirse como jugador; pero para pasar a integrar la lista de los grandes ídolos del club.