De vestido azul a lunares, labios de color rojo carmesí y cabello hasta los hombros, la chilena Mon Laferte se sentó frente a la computadora, en el comedor de su casa, y empezó a cantar “Amor completo”, una de las canciones más pedidas entre sus seguidores.

“Escriba aquí la canción que quiere que toque mañana en el concierto de YouTube”, había publicado ayer la joven de voz potente en su cuenta de Twitter, un posteo que sumó más de 5.000 respuestas y el doble de “me gusta” de sus seguidores.

Es que la artista chilena, de 36 años, supo ganarse en la escena "mainstream" un lugar muy importante como activista feminista, música y compositora, tanto que en 2017 y en el festival de Viña del Mar, el público por primera vez exigió que sea ella la galardonada con la Gaviota de Platino, aunque el premio lo terminó recibiendo Isabel Pantoja.

El año pasado, la compositora, que se presentó en streaming hasta pasadas las 16 con guitarra criolla en mano y para 25.000 espectadores, fue noticia de nuevo cuando no osciló en mostrar su repudio al presidente chileno Sebastián Piñera.

Durante la ceremonia de entrega de los premios Grammy Latino, que se realizó en noviembre pasado en Las Vegas, la compositora abrió el largo tapado negro que vestía y dejó al descubierto la leyenda "En Chile torturan, violan y matan" que había escrito sobre sus pechos.

En aquella oportunidad, la activista se llevó el gramófono en la categoría Mejor álbum de música alternativa por “Norma”, un trabajo conceptual que relata las etapas de una pareja, y que Laferte eligió para comenzar su show de esta tarde: los acordes de “Funeral”, un bolero que retrata el fin de la relación, inauguró la cita.

“Siento que no toqué en mil años”, expresó la cantautora que encara desde el rock una búsqueda muy profunda del folclore latinoamericano, entre nervios y risas y agregó: “Desde que estoy en cuarentena, estuve comiendo, leyendo, pintando… Nunca había estado tanto tiempo sin tocar”.

Durante el encuentro, la música, que también fue aplaudida por su discurso sobre el aborto, los derechos de la mujer y la justicia social en el festival de Viña del Mar en febrero pasado, repasó algunas canciones de su quinto álbum de estudio “La trenza”, como la que titula el disco; “Vendaval”, que dedicó a una amiga que había fallecido días atrás; y “Pa’ dónde se fue”, que le escribió a su papá y dedicó a quienes tuvieron padres ausentes.

Esta nueva dinámica de recitales por streaming, que surgió como consecuencia del aislamiento social preventivo implementado por muchos países para limitar el contagio masivo de coronavirus, está transformando el modo de experimentar el encuentro entre público y artista, que invita a sus seguidores a observar por una ventana.

Los músicos, compositores, intérpretes, vocalistas, por ejemplo, se encuentran en su ámbito cotidiano, entre elementos y detalles que dan cuenta de cómo son o qué les gusta, lejos de la producción, y del escenario, y a los que la mirada espectadora está atenta, porque no podría verlo de otro modo.

Mon Laferte llama a sus mascotas, interpreta una canción, se toma medio vaso de jugo de un solo sorbo, toca otro tema, se levanta de la silla y se acerca a la cocina, enciende la pava eléctrica para hacerse un té y mientras tanto le habla a la cámara, a unos metros de distancia, como si le hablase a un amigo con el que tiene confianza y le puede contar sobre su intimidad.

“Hoy me bañé. No me estaba bañando en estos días”, enfatizó con humor y añadió: “Me vestí y me maquillé para que me vean bonita”.

La artista se muestra en su rutina de cuarentena, como una más, invita a ser parte de su esfera privada, bebe un poco de té de una taza amarilla con grandes flores, que hace juego con las paredes de su comedor.

El repertorio también contempló “Por qué me fui a enamorar de ti” y “Mi buen amor”; la cantautora anunció "Beautiful", una nueva canción que verá la luz en los próximos días e invitó a escuchar “Trenzando”, su ciclo de charlas con exponentes de la música que estrena podcast por Spotify todos los lunes.

Al finalizar la transmisión del show acústico la artista no dudó en agradecer a todos sus seguidores por el cariño y por haberla acompañado durante su presentación, y publicó en Twitter: “Muchas gracias por conectarse al concierto, que les sea leve la cuarentena. Les ami. #EnCasa #MeQuedoEnCasa”.