A pesar de los desafíos que enfrentó el mundo en materia climática durante 2024, el año también trajo consigo desarrollos notables que representan esperanza y progreso. A continuación, repasamos los siete avances más importantes que marcaron el año en términos de sostenibilidad y cuidado del medio ambiente.

1. Reino Unido cierra su última planta de carbón

En un hecho histórico, Reino Unido, cuna de la revolución industrial, apagó las turbinas de su última central eléctrica de carbón en septiembre de 2024. La planta de Ratcliffe-on-Soar dejó de emitir humo, marcando el final de una era para un país que lideró la industrialización basada en combustibles fósiles. Este cierre simboliza un paso decisivo hacia la descarbonización, con planes para transformar las antiguas instalaciones en centros de almacenamiento de baterías renovables.

El esfuerzo global por proteger la biodiversidad y mitigar el cambio climático ha dado frutos en un año lleno de retos.

2. La energía renovable lidera el cambio global

Las energías limpias alcanzaron niveles récord en 2024. En Estados Unidos, la energía eólica superó a la generada por carbón, mientras que China continuó liderando la transición hacia fuentes sostenibles. Según la Agencia Internacional de Energía (AIE), se espera que la capacidad mundial de energías renovables se duplique para 2030, consolidando un cambio estructural impulsado más por la economía que por políticas gubernamentales.

Aunque los desafíos climáticos dominaron los titulares, estos logros abren camino a un futuro más verde.

3. Reconocimiento legal para la naturaleza

El año marcó avances significativos en el reconocimiento de los derechos legales de ecosistemas y animales. En Brasil, las olas del océano en la ciudad de Linhares fueron declaradas entidades jurídicas, mientras que en Nueva Zelanda, las montañas ancestrales de Taranaki adquirieron personalidad jurídica. Estas medidas buscan garantizar la protección de espacios naturales al otorgarles un estatus legal que fomente su conservación.

En medio de temperaturas récord y fenómenos extremos, estos avances ofrecen esperanza para el medio ambiente.

4. Nuevas áreas protegidas en los océanos del Atlántico Norte

Las Azores establecieron la mayor área marina protegida de la región, abarcando el 30% de las aguas que rodean este archipiélago portugués. Este santuario, que incluye fuentes hidrotermales y cientos de especies marinas, representa un modelo de conservación efectiva en un momento crítico para la biodiversidad oceánica.

Desde energías renovables hasta la protección de ecosistemas, el año cerró con logros notables para la sostenibilidad.

5. Reducción histórica de la deforestación en la Amazonía

Brasil reportó una caída del 30% en la deforestación de la Amazonía, alcanzando su nivel más bajo en nueve años. Este logro se atribuye a las políticas implementadas por el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, quien reforzó la vigilancia contra la tala ilegal y promovió estrategias para proteger el "pulmón del mundo".

A pesar de las adversidades climáticas, el año nos deja grandes logros en la protección del medio ambiente.

6. Conservación que restaura biodiversidad

Proyectos como la Iniciativa Altyn Dala en Kazajistán demostraron que la conservación puede revertir el daño ecológico. Gracias a esfuerzos sostenidos, el antílope saiga, que estuvo al borde de la extinción con apenas 20,000 ejemplares en 2003, ahora cuenta con una población de más de 2.8 millones, destacando el impacto positivo de la cooperación internacional y las iniciativas científicas.

Innovación, compromiso global y conservación marcaron un año crucial en la lucha contra el cambio climático.

7. El liderazgo indígena en la recuperación ambiental

Las comunidades indígenas continuaron desempeñando un papel crucial en la restauración de ecosistemas. En California, la tribu Yurok lideró la reintroducción del salmón en el río Klamath tras la eliminación de represas históricas. Además, impulsaron programas exitosos para reintroducir cóndores de California en sus territorios, logrando un aumento constante en las poblaciones de esta ave sagrada.

Mientras el cambio climático presenta nuevos retos, estos hitos destacan el impacto de los esfuerzos humanos por preservar la naturaleza.

Un camino hacia un futuro sostenible

Aunque 2024 fue un año de contrastes, estos avances subrayan la capacidad de la humanidad para enfrentar el cambio climático y proteger el medio ambiente. La combinación de innovación, colaboración y liderazgo comunitario es clave para continuar por este camino de transformación positiva.