Ante la imposibilidad de abrir sus puertas como boliche por la pandemia, los dueños del boliche Grita Silencio achicaron el local bailable para que funcione como bar y vendieron gran parte de las instalaciones del lugar ubicado en Chacras de Coria.

Esta mañana comenzó a circular en las redes una versión que indicaba el cierre del boliche por la situación económica provocada por la pandemia.

Sin embargo, uno de los dueños del centro nocturno de Chacras desmintió esta versión, pero confirmó la venta de varios elementos porque “se están achicando” hasta ver qué sucede con la situación sanitaria y económica en la provincia.

"Mucha gente ha viralizado la versión de que estamos vendiendo las cosas y hemos cerrado, pero no es verdad. Estamos achicando el negocio y viendo si vamos o no vamos a cerrar. Vemos que no vamos a volver con un boliche de 2.500 personas porque es imposible", explicó uno de sus dueños al diario Uno.

"La idea es achicarnos, vender cosas que tenemos para mantener la estructura, y estamos con un proyecto de abrir un boliche más chico, pero con el mismo producto que tenemos nosotros, que es muy bueno, y con la misma energía. Esto va para largo. Esperamos que para el verano podamos volver a la normalidad", agregó el empresario mendocino.

El boliche Grita Silencio, que lleva casi 6 años abierto, buscará reconvertirse para no tener que cerrar sus puertas por la pandemia. Foto: Facebook de Grita Silencio.  

Finalmente, el vocero del Grita criticó a las autoridades provinciales por “los excesivos y celosos” controles para con las empresas que buscan reconvertirse para sobrevivir la pandemia:"queremos ver cómo nos podemos acoplar a la economía y al comercio ahora. Somos el sector más castigado, y hace rato que vienen castigándonos con los controles policiales solamente a nosotros".

De esta forma, el boliche Grita Silencio buscará transformarse para combatir la “nula rentabilidad” en esta etapa de pandemia y, de este modo, impedir el cierre de un lugar que lleva funcionando casi 6 años de manera ininterrumpida.

Los bares deberán servir comida para poder funcionar

El Gobierno de Mendoza dispuso el cierre de los bares, no así de los restaurantes y cafés, por 15 días desde este martes, tras el aumento de casos positivos de COVID-19.