Twittear muchas veces se vuelve un problema cuando lo que queremos decir sobrepasa el límite de espacios permitido para un mensaje. A raíz de esto, Twitter (caracterizado principalmente por sus 140 caracteres para realizar publicaciones) comenzó a probar, esta semana, y alrededor del mundo entero, una nueva modalidad para escribir un tweet: 280 caracteres.

“Esto sólo está disponible para un grupo pequeño en este momento”, escribió Aliza Rosen, gerenta de productos de Twitter, en un comunicado oficial. La idea de la empresa es recolectar datos y comentarios antes de tomar una decisión definitiva y lanzar los 280 caracteres para todos los usuarios. La razón por la cual se está realizando paulatinamente este cambio responde al hecho de que existen idiomas, como el español y el inglés, que llegan fácilmente al límite de 140 caracteres en un mensaje; algo que no sucede con el japonés, por ejemplo, cuyos tweets suelen  tener un promedio de 15 caracteres. “Esto se debe a que en lenguas como el japonés, coreano y chino se puede transmitir el doble de la cantidad de información en un carácter”, dijo Rosen, haciendo una comparación con otros idiomas.

El deseo de la empresa por ampliar el espacio para expresar un pensamiento sin dudas generó un gran debate en la red social entre quienes están a favor y en contra de los 280 caracteres.

No son pocos los usuarios de la plataforma que argumentan que es muy difícil encajar un pensamiento complejo y completo en un solo tweet. De hecho, muchos de ellos deciden no publicar nada cuando se ven en la difícil situación de tener que eliminar alguna palabra considerada imprescindible en el mensaje. Por otro lado, hay quienes sí publican, pero un solo tweet no alcanza para decirlo todo. Sin ir más lejos, un ejemplo de esta última situación lo podemos apreciar en la forma que tiene de twittear la ex presidenta de la Nación Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, quien, para dar un comunicado a través de esta red social, necesita más que solo 140 caracteres. De allí las famosas “cataratas de tweets”.

Quienes están en contra de los 280 caracteres argumentan que esta decisión rompe con lo que consideran la “esencia” de Twitter. Para ellos, la brevedad de los mensajes fomenta la creatividad, el ingenio, y permite una forma de comunicación que se diferencia sustancialmente de otras redes sociales, y en especial, Facebook. Incluso se generó un debate en torno a las consecuencias que tendría esta medida en los discursos de figuras con mucho peso en la política mundial. Es el caso de Donald Trump, el usuario que más rentabilidad le da a Twitter.

 “Twitter se trata de ser breves. Es lo que hace que sea una gran manera de ver lo qué es lo que está pasando. Los Tweets van al punto con la información o pensamientos que realmente importan. Eso es algo que nunca cambiaremos”, explicó la empresa.

Según publicó el sitio Puro Marketing, la red social ha tenido problemas de crecimiento y engagement, y expandir la cantidad de caracteres podría generar mayor interés en ella. “No está consiguiendo que sus usuarios crezcan y la cifra de usuarios activos mensuales está estancada. En Estados Unidos incluso ha perdido usuarios”. Sin embargo, el sitio advierte que “esto podría convertirse en un problema diferente, ya que el movimiento haría que, al final, sus diferencias con las demás redes sociales se difuminaran”, convirtiéndose en un potencial enemigo de Facebook.  

Por supuesto, muchos, dentro de la comunidad twittera, se tomaron la noticia con humor. Hace días que en la red social no se habla de otra cosa que no sea de los 280 caracteres y se han escrito con mucho ingenio miles de tweet en pro y en contra de esta iniciativa.