En una de las campañas más polarizadas de la historia, Jair Bolsonaro logró capitalizar la decepción de los brasileños frente a los escándalos de corrupción, al estancamiento económico que generó la peor recesión en la historia del país y la creciente criminalidad que azota las calles brasileñas.

Y se impuso, según el analista Pablo Wehbe, entre otras cosas por esta banalización de la política que se traduce "en la política convertida en un reality, en un show, también las redes sociales, twitter, facebook, instagram... es decir las cosas valen para 10 minutos, dentro de quince minutos, la realidad cambió y es otra cosa... eso también ha golpeado a la política".

Y agreg{o: "Si a eso le sumamos dirigentes con una absoluta incapacidad de comprender a la gente, ni llevar racionalidad a los discursos fascistas... entonces lo que podemos decir del Brasil que se viene, es que será un Brasil violento". Con mucha tela para cortar, la relación con Argentina, el Mercosur, los tratados de libre comercio y el panorama que se viene en la relación con Brasil, escuchá la nota completa a continuación.  

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