La presentación se llevó a cabo en horas de la tarde en el Cilindro Central del Centro de Información y Comunicación de la UNCUYO (CICUNC). Presidieron el acto el rector de la casa de estudio, Arturo Somoza y el embajador de chile en la argentina, Adolfo Zaldívar.

Hugo Eurnekian, el ejecutivo representante de la Corporación América, fue quien expuso los lineamientos y avances del proyecto, pues el grupo que éste representa encabeza a las empresas encargadas de llevar adelante la primera etapa de la iniciativa privada, conocida anteriormente como el proyecto del “tren trasandino”. 

Según explicó, el corredor tendrá un recorrido que irá desde el océano Pacífico hasta el Atlántico, y que incluye un tren ferroviario de baja altura. El objetivo es descomprimir el paso Cristo Redentor para dar respuesta a la demanda de transporte insatisfecha, optimizando así todos los tipos de integración bilateral.

“El cruce de la cordillera se realizará en solo 4 horas, los 365 días del año, independiente de las condiciones climáticas, porque estará construido bajo la línea de la nieve”, aseguró y remarcó que estos son los principales requisitos que debe cumplir la iniciativa.

El empresario destacó además que entre los beneficios del Corredor Bioceánico Aconcagua y del túnel a baja altura se cuenta la creación de fuentes de trabajo vinculadas con las actividades comerciales y productivas que se generarán en en el marco del proyecto.

Por su parte, el embajador Zaldívar agradeció a las empresas que llevan adelante la iniciativa “porque forma parte de la tarea destinada a favorecer la integración y de intercambio comercial”. Equiparó la obra con el Canal de Panamá del Sur, y en este punto subrayó el desafío que significa para ambos países su puesta en marcha.

En tanto, el rector Somoza reafirmó el compromiso de la universidad con el proyecto del Corredor Bioceánico Aconcagua en especial y con toda propuesta tendiente a la integración entre las dos naciones.

El proyecto

Será concretado por una sociedad de empresas que agrupa a Corporación América (Argentina), Empresas Navieras (Chile), Mitsubishi Corp. (Japón), Geodata (Italia), y Contreras Hnos. (Argentina). Esta sociedad, tras 4 años de estudios y US$ 25 millones de inversión en esa etapa, ya entregó el proyecto final, quedando ahora a la espera del llamado a licitación internacional por parte de la Entidad Binacional, organismo integrado por representantes de los gobiernos chileno y argentino.

El Bioceánico Aconcagua, en sólo 205 kilómetros, resuelve el punto más débil del Eje Mercosur–Chile, salvando el cruce de los Andes con una solución técnica de punta. Esta obra traerá beneficios a un área de más de 3 millones de km2 y una población de 126 millones de habitantes que representa el 48% del total sudamericano, donde se genera el 70 % de la actividad económica continental.

Según explicó Eurnekian su puesta en marcha dará respuesta a los problemas del Paso Cristo Redentor, a través de un túnel de baja altura de 52 kilómetros, garantizando menores costos y tiempos durante todo el año.

Además contará con  un ferrocarril eléctrico de alta capacidad de carga que representa una solución a largo plazo ya que podrá transportar hasta 77 millones de toneladas por año, superando ampliamente las que se transportan en la actualidad. También restará los costos ambientales, pues trabajará con un tren impulsado por energía eléctrica.