Pese a las masivas marchas en todo el país de diferentes sectores para defender la educación pública tras el ajuste del Gobierno a las universidades nacionales, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) –que reúne a rectores y rectoras de más de 70 casas de estudio de nivel superior públicas–solo tiene en sus manos un comunicado de hace unos días, en cual la Secretaría de Educación lo convoca a una reunión para el 30 de abril. El Ejecutivo ya dejó en claro que la discusión sobre los fondos “está saldada”; sin embargo, para los miembros de este organismo es una puerta que se abre para poder dialogar y avanzar en la búsqueda de soluciones.

Desde el CIN, dejaron en claro que el temario que buscan discutir es cómo se actualizan las partidas presupuestarias para afrontar la inflación del último año, más la que golpeó en los primeros meses de 2024, según explicaron a Página/12. Recordaron que el presupuesto universitario está en su mínimo histórico. "Si bien nosotros queremos hablar de presupuesto, en la reunión está claro que ellos quieren hablar de auditorías. Nosotros ya dijimos que las universidades deben ser auditadas, como ya lo son y, según fija la ley, eso es potestad del Congreso", remarcaron. El Gobierno, en cambio, quiere introducir controles que dependan del Ejecutivo.

Luego de las multitudinarias movilizaciones, no hubo repercusiones institucionales favorables: el Congreso no trató el proyecto de emergencia universitaria, mientras que desde el Gobierno se desacreditó lo que pasó en las calles. “No hay nada por parte del Gobierno, más allá de confirmarnos una reunión", indicaron desde el CIN a Página/12.

Victor Moriñigo, rector de la Universidad Nacional de San Luis y actual presidente del CIN, indicó este miércoles a La Nación que espera que el Gobierno pueda comprender que ellos están para poder dialogar. “Con diálogo y respeto, vamos a poder transitar los próximos meses de la mejor manera, sin malgastar el tiempo en críticas, en destratos”, dijo. Para él, es clave que toda la energía se canalice en encontrar una solución para los temas presupuestarios y salariales de trabajadores y trabajadoras de las universidades públicas.

En una conferencia de prensa, la rectora de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO), Esther Sanchez, hizo una evaluación de la marcha federal universitaria y habló sobre la convocatoria que recibió el CIN: "Esto, de alguna manera, abre un diálogo un poco más profundo para ir resolviendo en conjunto este problema”. El inconveniente al que hizo referencia es la crisis presupuestaria que atraviesan las universidades públicas al tener una pauta de gastos reconducida de 2023 con una inflación anual cercana al 300 % y recibir fondos solo para gastos de funcionamiento. Si bien valoró el esfuerzo del Ejecutivo nacional para depositar las últimas partidas de marzo, recalcó que, “para tener una educación de calidad, es muy importante financiar esa educación de calidad", lo que implica también hablar de mejoras en el salario docente y nodocente.

Por eso, agradeció la respuesta de la comunidad en las calles. “Ha sido una muestra contundente del apoyo de la sociedad a la educación pública y, en especial, a la universidad pública", sostuvo, y señaló que se trata de una lucha legítima de toda la sociedad por una educación pública, como un derecho humano y como una responsabilidad indelegable del Estado de financiarla. "Responsabilidad que surge de la misma Constitución Nacional, que habla de educación gratuita y de la obligación del Estado de financiarla", apuntó Sanchez.

Quienes encabezan las universidades públicas estuvieron el martes en el palco central en Plaza de Mayo. Foto: Leandro Teysseire

Carlos Greco, rector de la Universidad Nacional de San Martín (Unsam), dijo a La Nación: “La conclusión que sacamos es que hay una expresión de toda la sociedad que valora la educación y lo que debe ser una política de Estado. Fue una marcha federal, fue muy plural. Nuestra vocación es sensibilizar al Gobierno para que reconozca ese sentido y que tome a la educación como un atributo para solucionar los problemas del país”. Indicó que lo que piden es previsibilidad. “Entendemos la situación macroeconómica, entendemos cuál es la restricción y acompañamos, pero lo que hemos tenido hasta ahora son decisiones consensuadas, tanto en el tema salarial, donde no hubo acuerdo, como en el tema de los gastos. No hubo acuerdo sobre cómo enfrentar la situación”, consideró Greco.

Franco Bartolacci, rector de la Universidad Nacional de Rosario, dijo a La Nación: “En lugares donde hay universidades y en lugares donde ni siquiera hay, la gente fue a defender la educación y la universidad pública. Impresionante, nunca vi algo así. Fue muy emocionante lo que pasó en todo el país”. Y coincidió con sus colegas en que la movilización mostró que la sociedad puso todo en su lugar al decir que lo que hay que cuidar es la educación pública. "Estamos muy agradecidos con la sociedad. Esto no hubiese pasado si hubiésemos sido la comunidad universitaria únicamente, acá hubo mucha gente que salió a 'bancar' la educación de manera espontánea. En todo el país hubo más de un millón de personas”. Dijo que la expectativa ahora es que se pueda construir una mesa de trabajo y llegar a un diálogo razonable.

La cita es el 30 de abril. Ese día, rectores y rectoras que integran el Comité Ejecutivo del CIN se reunirán en la Subsecretaría de Políticas Universitarias. Allí, el secretario de Educación, Carlos Torrendell, será de ahora en más la cabeza de la negociación con el sector, en vez del subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez.

Jorge Calzoni, rector de la Universidad de Avellaneda, dijo a Página/12 que espera que la contundente marcha no sea subestimada por el Gobierno. "Es imposible sostener con los mismos gastos. No es una cuestión de austeridad, no llegamos con los números. Y queremos sostener lo que tenemos, no tirar manteca al techo", explicó. Indicó que las universidades son necesarias y que en cada provincia argentina hay al menos una. "Si comparás con Brasil y México, la cantidad de universidades por población es casi tres veces menor", señaló el rector, que también se refirió a la discusión de las auditorías: "Ellos creen que la educación es un curro".