En el marco del Día Mundial del Animal, la médica psiquiatra especialista en discapacidad del Damsu, Alejandra De La Rosa, dialogó con Radio U respecto de la importancia que tienen los diferentes animales a la hora de encarar una terapia médica. Además, la médica hizo hincapié en la importancia de cuidar los derechos de los animales.

Antes de evaluar los beneficios de la terapia con animales, las personas “deben identificar las características clave de la práctica”. La terapia con mascotas involucra criaturas como perros, gatos, caballos y más. Los animales brindan ayuda física y emocional a las personas que luchan contra el cáncer, enfermedades cardíacas, depresión y otras afecciones.

En primer lugar, la médica de Damsu explicó en qué consiste esta práctica médica que tan buenos resultados dio en estos últimos años: “La terapia con mascotas no es algo nuevo. Surgió hace 30 años atrás o más, cuando se planteó específicamente la posibilidad de que aquellas personas con discapacidad que no pueden tener comunicación tradicional o problemas de ánimo o inconvenientes pudieran establecer un vínculo con los animales para que las y los fortalezca emocionalmente y también en cuanto a sus terapias”.  

En ese sentido, la especialista del Damsu agregó: “Hace más de 10 años comenzó la equinoterapia (terapias asistidas con caballos) acá en Mendoza, más precisamente en Luján. Venía una persona de Buenos Aires y se otorgaba todo de forma gratuita. En ese tiempo, estaba haciendo intervención con un adolescente que tenía una encelopatía crónica que no le permitía caminar y cuando aplicamos este método, me manifestó que por primera vez había podido correr y casi volar luego de esta conexión con los animales”.

Por otra parte, De La Rosa enfatizó que la no explotación de las mascotas es fundamental para que la terapia funcione como corresponde: “La dinámica es bastante general. Como primera medida, creo absolutamente en este método siempre y cuando se respete el derecho de los animales. No me parece que se realice una cuestión moderna de la utilización del animal -como antes era tirar de un carruaje-, y se lo use solo para el servicio de las personas. Esa práctica afecta al animal y no la vamos a avalar”.

Finalmente, la médica psiquiatra alentó a que “se realice responsablemente esta práctica” que tantos “beneficios genera” tanto para pacientes como para la propia mascota que “cumple su cometido de dar amor” sin verse invadido “en sus derechos por las personas de turno”.