Si bien no existe un solo alimento con propiedades mágicas, algunos elementos de origen natural son llamados “superalimentos” porque aportan mayores cantidades de vitaminas, minerales y promueven beneficios en la salud. En este sentido, Silvina Rodríguez, encargada del servicio de nutrición de Osep, indicó que la mayoría de las frutas y verduras producidas en la provincia son altamente nutritivas.

“Hablar de un superalimento es una forma de llamarlo un poco más comercial, pero no hay un superalimento sino varios que tienen un gran aporte nutricional junto a un valor calórico adecuado. Estos se diferencian de aquellos que no son nutritivos como los procesados o ultraprocesados”, detalló Rodríguez.

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Para la especialista, en Mendoza se pueden conseguir muy buenos superalimentos porque la mayoría de las frutas y verduras lo son. Desde el ajo que tiene un gran valor nutritivo y vitaminas, hasta el zapallo, la papa, la cebolla o la zanahoria, son vegetales con grandes aportes. Sin embargo Rodríguez destaca que “en la combinación de colores de frutas y verduras vamos a completar la cantidad de vitaminas y minerales diarias que el cuerpo necesita”.

“El kale podría ser un superalimento que si bien no es netamente mendocino, se empezó a comercializar y plantar por los resultados. Es una col como el brócoli o coliflor y resulta ser un buen antioxidante con efectos depurativos, con presencia de vitamina C, K, E y del complejo B, al igual que cualquier otra verdura. Quizás lo que sí tiene es un mayor aporte de calcio, entonces para quienes no consumen lácteos es una buena opción”, explicó Rodríguez.

Al mismo tiempo la quinoa o las semillas de chía también son un complemento necesario para las comidas ya que son una importante fuente de proteínas, con propiedades antioxidantes, ricas en aminoácidos, vitaminas y minerales. Aunque no son originarias de Mendoza, en la provincia se puede conseguir 200 gramos de quinoa a $170 y 100 gramos de chía a $50.

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Por otro lado, uno de los productos mendocinos con mayores aportes a la salud es el aceite de oliva, que ayuda a reducir los niveles de colesterol "malo" LDL y triglicéridos. Contiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y anticancerígenas y mejora la sensibilidad a la insulina y el nivel de azúcar en sangre. Una botella de 750 mililitros puede rondar los $450.

En la lista de superalimentos también ocupan un gran lugar los frutos secos como las nueces o almendras, las cuales son ricas en ácidos grasos y minerales. “El consumo diario de dos o tres unidades por día ayuda al sistema nervioso”. En la provincia pueden conseguirse entre $80 los 100 gramos de nueces y $150 los 100 gramos de almendras.

 “Más allá de consumir estos alimentos que son buenos en las dietas, es necesario que no se repita un único alimento durante un periodo largo. Acá somos muy consumidores de grasas saturadas y carnes rojas pero tenemos que tratar de acercarnos a una dieta mediterránea, con presencia de frutas, verduras, frutos secos, y preferir la carne blanca antes que la roja”, remarcó la profesional de la salud.

Licuados y alimentación detox, una moda que funciona

En redes sociales, una gran cantidad de influencers y celebridades exhiben licuados y dietas para desintoxicar el cuerpo. Para Silvina Rodríguez “todo lo que sea de origen natural es bueno”.

“Todos los licuados que se hagan con vegetales o frutas naturales no van a tener nunca una contraindicación porque aportan la vitamina del alimento y la fibra, que quizás esté modificada al procesarla pero va a aportar una acción depurativa, energizante. Ahora, tampoco se pueden utilizar como reemplazo de alimentos porque necesitamos vitamina D, calcio, proteínas de otras hortalizas”, señaló la especialista en nutrición.

De la misma manera, la mejor forma de preparar los alimentos para obtener grandes cantidades de sus propiedades originales es consumirlos en crudo o al vapor. “Si los hervimos perdemos algo de las vitaminas o los minerales en el agua, pero de todas maneras tampoco es tan grave siempre y cuando llevemos una alimentación sana, colorida y variada”, concluyó Silvina Rodríguez.

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