La aparición en escena de Skatepark, una historia que explora los vínculos y la resiliencia frente a un acontecimiento del pasado que llega a removerlo todo, provocó la aceptación inmediata. La obra fue un éxito durante toda la temporada. Luego de un impasse, el elenco anunció su regreso para despedir a lo grande la puesta con tres únicas funciones. Estas se realizarán los días 7, 8 y 9 de junio, a las 21.30, en la Sala Ana Frank. Las entradas para todas las fechas ya se pueden adquirir de forma anticipada.

Skatepark es una obra dirigida al público adulto que indaga en mecanismos conflictuales de baja intensidad y en atmósferas de intensa quietud, inspirados en postulados del movimiento cinematográfico Nouvelle Vague y en pinturas de Edward Hopper. En su desarrollo, intenta generar, desde un recorte de la realidad, pero no desde un realismo puro, un clima lacónico de subsistencia sostenida en los vínculos de una familia que atraviesa un punto de inflexión y resiliencia, donde el espacio, la sonoridad y la luz son ecos visibles de su drama interior.

La sinopsis de la puesta de Ósjar Navarro Correa sitúa a Gabriel (Diego Quiroga) y Verónica (Claudia Racconto), que inician el día con una decisión tomada dentro de un clima cotidiano en aparente desafectación. Las palabras y acciones entretejen un vínculo en tensión e intimidad, pero la irrupción de Clara (Pinty Saba) vuelve a abrir la puerta a un suceso del pasado. Los personajes, como sumidos en un sopor anímico que los asfixia, buscarán prevalecer sobre aquellas zonas oscuras que parecen cubrirlo todo.

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