Hubo sanción inicial para el proyecto de Presupuesto 2019, pero sin autorización para refinanciar la deuda de la provincia. Con duros cruces entre el oficialismo y la oposición, la iniciativa fue avalada sólo en general, por 27 votos positivos, 20 negativos y una ausencia.

Es que desde los dos principales bloques que tiene el peronismo local, negaron  levantar la mano para permitir el refinanciamiento de deuda, también llamado “roll-over”.

Desde Casa de Gobierno vieron en esta actitud algo inentendible, porque, sostienen, siempre se ha permitido esta herramienta desde el regreso a la democracia.

Los artículos conflictivos (del 37 al 41) planteaban refinanciar deuda por poco más de 3600 millones de pesos. Para que obtuviese luz verde, necesitaba mayoría especial en la Cámara Baja. En cambio, para el resto del articulado, alcanzaba con mayoría simple.

Finalmente, tras bravas acusaciones cruzadas, la sesión cerró con la palabra del presidente de la Cámara baja, Néstor Parés, quien “bajó” a una banca y dijo: “Esto me da mucha pena”.

Previamente, la ministra de Hacienda, Paula Allasino, presente en la Legislatura, había dicho. “Gana la política sobre las necesidades de la provincia”.

“Por un capricho político no se va a poder presentar un presupuesto con superávit corriente y que vamos a tener que rebajar para cumplir con la amortización del año que viene”, agregó la ministra.

Así, dio a entender que se trata de una jugada del peronismo contra del gobernador Alfredo Cornejo.

Con este contexto, el proyecto pasó para su tratamiento en el Senado, sin los artículos que van del 37 al 41, que tratan sobre renegociación de la deuda.

Ahora, habrá que esperar a ver cómo rearmará la pauta de gastos el Ejecutivo y si es que reduce la partida destinada a gastos de capital y obras, unos 12 mil millones de pesos (10,05% del presupuesto), para cancelar los compromisos de deuda que no tendrá la chance de refinanciar.

Sin aval del PJ para refinanciar deuda, se trata el Presupuesto

Parte del PJ se plantó en rechazar el "roll-over". Desde el Ejecutivo afirmaron que es una herramienta que se usa desde que volvió la democracia.