Carlos Benedetto, presidente de la Federación Argentina de Espeleología, explicó que el fracking es un método de extracción de petróleo que consiste en fracturar hidráulicamente la roca que contiene el mineral, con grandes cantidades de agua y de arena. Esto puede provocar movimientos en la tierra, contaminación de las napas subterráneas y un gasto incomensurable de agua. Por esas razones, las empresas que usan este sistema deben ser autorizadas. 

En Malargüe se tomó esta decisión en "abierta violación de leyes y de la propia Constitución Nacional". Sin audiencias públicas, la población se notificó por el Boletín Oficial.

Así, la indignación fue general porque "se ha hecho a escondidas". Todos los proyectos que puedan impactar negativamente en el medio ambiente deben seguir un protocolo por la Ley General de Ambiente de la Nación 25.675 y la Ley Provincial 5.961, que exige en primera instancia la consulta popular.

Ante lo ocurrido se presentó un amparo para que se actúe con celeridad y para que se someta a consideración del pueblo de Malargüe esta actividad.