Si bien cada caso debe ser tomado de manera individual, la sensación imperante a partir de la disposición del Tribunal Oral Federal N.° 8 de ordenar la liberación de Carlos Zannini y Luis D’Elía, detenidos desde hace más de tres meses por la causa del supuesto encubrimiento del atentado contra la AMIA, es que la misma decisión podría caberle a la expresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.

Además de que ya la Justicia había eximido de prisión al excanciller Héctor Timerman por razones de salud, por lo que los únicos detenidos en esta causa pasan a ser Jorge “Yussuf” Khalil y Fernando Esteche, ni bien fue liberado, Zannini argumentó que la causa fue “inventada” y que “tiene como objetivo perjudicar a Cristina Fernández de Kirchner”, al tiempo que sostuvo que con su liberación, el pedido de desafuero contra la senadora nacional “se queda sin sustento”.

La resolución del TOF N.° 8 se adoptó en horas de la madrugada, a partir de un pedido de la fiscal federal Gabriela Baigún, que interpretó la inexistencia del riesgo de fuga o de entorpecimiento de la causa de parte de Zannini y D’Elía, y que el delito de encubrimiento por el que están acusados es excarcelable. Y equiparó la situación de los ahora liberados con la de los acusados en el juicio que justamente se está llevando a cabo por otro encubrimiento del atentado a la AMIA, el exjuez Juan José Galeano y el también senador y expresidente Carlos Menem, quienes se encuentran en libertad.

Así las cosas, se desprende de esta situación que el pedido de desafuero de Cristina Fernández de Kirchner con el que el oficialismo pretendía avanzar en el Senado en los próximos días se torna prácticamente abstracto. El tema fue planteado en la reunión constitutiva de la Comisión de Asuntos Constitucionales celebrada el miércoles pasado, donde se acordó tratarlo en la primera reunión que realizara la comisión. Como es algo que genera resistencias por parte del kirchnerismo y sobre todo del bloque que conduce Miguel Pichetto, lo más probable es que, ante lo sucedido, el oficialismo desista de la intención de avanzar con el mismo ahora, por el desgaste innecesario que podría generar en esta coyuntura.