La investigación que lleva adelante la Justicia tras el trágico vuelco ocurrido en Uspallata, sobre la ruta Nacional 7 el domingo, minutos antes de las 6.30 de la madrugada y que se cobró la vida de tres personas (un niño de diez años, una nena de tres y su madre, de 35 años que estaba embarazada de  dos meses, tuvo un nuevo capítulo este miércoles.

Según comunicó el Ministerio Público Fiscal, la primera medida fue ampliar la imputación contra el chofer de la unidad, Víctor Gómez, quien habría sido imputado por el cargo de “homicidio culposo agravado por el número de víctimas”.

En su lugar, ahora la causa que enfrenta el chofer que aseguró haberse quedado dormido mientras conducía, es más compleja, ya que a la carátula anterior se le suma la de “lesiones graves, agravadas por el número de víctimas y lesiones leves”.

Otra decisión tomada por la fiscal a cargo, Liliana Giner, fue trasladar a Gómez a la fiscalía de Uspallata para notificarlo sobre la nueva imputación. Según trascendió, el hombre no ha declarado hasta el momento, aunque sí se aseguró que permanecerá detenido en Uspallata hasta tanto se siga avanzando con la investigación judicial.

Tres muertos al volcar un colectivo chileno en Uspallata

Otra vez un hecho trágico con un transporte de pasajeros en alta montaña enluta a Mendoza. Hay 15 heridos, tres de gravedad. De los 45 pasajeros, 19 son argentinos. El chofer está detenido.

Hay que recordar que además de provocar la muerte de dos niños y una mujer de nacionalidad chilena (Maritza Ramos Chana, Esteban Arredondo y Mihe Calderón), la pérdida del dominio de la unidad puso en riesgo la vida de otras 44 personas que resultaron heridas, algunas de gravedad.

Por otra parte, desde el Ministerio Público explicaron que este jueves la fiscal solicitará la audiencia de prisión preventiva, aunque aún no hay una fecha exacta.

El hecho en el cual está señalado Gómez ocurrió este domingo a las 6.20 de la mañana, en la Ruta Nacional 7, a la altura del kilómetro 1157, ubicado en la zona conocida como Cabo Blanco. El micro, perteneciente a la empresa chilena Transporte Ahumada había salido desde Chile con destino a Mendoza y se desbarrancó sobre el río presuntamente, luego de que el chofer que lo conducía se quedara dormido.