El miércoles 20 se realizó la primera reunión de la Comisión Investigadora en Santa Rosa, la cual examina 12 denuncias que pesan sobre el intendente Sergio Salgado. De esas 12 acusaciones, ayer se analizaron 6, y la comisión se reunirá nuevamente el martes de la semana que viene, a la espera de las pruebas que restan.

La reunión fue realizada en privado y participaron los 10 miembros del Concejo Deliberante del departamento del Este. El principal denunciante, y quien llamó a la Comisión, es el concejal y exintendente Antonio Ponce (PD). En un principio fue designado presidente del comité, pero el edil decidió renunciar a ese cargo por “cuestiones éticas”, según dijo, ya que él es el denunciante. En su lugar asumió Roberto Vanin (UCR).

Debido a la privacidad de la reunión, no se puede dar a conocer cuáles son exactamente las denuncias que se investigaron. De todos modos, Ponce dijo que “obviamente son puntos que en general tratan temas relacionados con el despilfarro del dinero por parte del intendente, como los cheques sin fondo y el mal manejo del municipio”. Al finalizar la reunión, la comisión recibió a los delegados de ATE y algunos trabajadores municipales para explicarles lo sucedido y llevarles un mensaje de tranquilidad, pues se necesita paciencia para solucionar los diversos conflictos.  

Salgado confía en que va a seguir en su puesto de trabajo y va a salir de la crisis.
 

El estado de Santa Rosa

Si bien durante esta semana se informó sobre la apertura del municipio y la vuelta a la normalidad de la administración y algunos servicios, desde el gremio de ATE desmienten que Santa Rosa esté trabajando normalmente. “No es cierto que se han restablecido los servicios. En la plaza municipal todavía no se corta el pasto, que está muy largo y lleno de basura. Hay mugre en todos lados”, dijo Eduardo Jalit, delegado de ATE y exmiembro del gabinete de Salgado. Al respecto, Antonio Ponce también aseguró que “no se ha restablecido nada. Es mentira. Yo todavía veo el desastre”.

Uno de los servicios fundamentales, y que aún está en falta, es la distribución de agua potable. Santa Rosa es un departamento grande, y mucha de su población es rural, por lo que la municipalidad normalmente distribuye el agua en camiones. La gente, aseguran los trabajadores municipales, no tiene más remedio que comprar botellas a la espera del servicio.

“Lo que estamos buscando es dialogar con el intendente y hasta ahora no se ha podido. Nuestro reclamo es salarial, de ahí en más, el tema de las denuncias es otra cosa”, aseguró Jalit. Dijo, además, que durante el transcurso de esta mañana algunos trabajadores viajaron a la ciudad de Mendoza con el objetivo de realizar una reunión con los miembros de ATE y un abogado para encontrar una solución a la situación. “Seguiremos reclamando el mes de noviembre y el aumento del aguinaldo”.

El delegado del gremio admite que desde la población santarrosina no encuentran el apoyo que necesitan para los reclamos. “Hay obras sobrefacturadas, hay un exceso en la contratación de personal de planta y no hay registro de nada. Ante la situación, se ha manifestado poca gente”.