La Provincia ha realizado un gran avance en materia de salud materna, ya que la tasa de muerte materna disminuyó de 3,9 en  2016 a 1,6 en 2017. Así como la baja de la mortalidad infantil, donde se observó un descenso, con una tasa 7,51 por mil recién nacidos (RN) vivos y 20 defunciones menos que en 2016. Estos datos los anunció el gobernador Alfredo Cornejo en su discurso previo a la apertura de sesiones ordinarias en la Legislatura y luego el dato fue profundizado por su equipo de prensa. 

Las causas

Al respecto, la ministra de Salud Desarrollo Social y Deportes, Elizabeth Crescitelli, expresó: “Hemos trabajado fuertemente en la salud materna, utilizando la red perinatal en cada rincón de la provincia”.

La funcionaria agregó que el hospital Ecaravelli, en el Valle de Uco, concentró grandes esfuerzos del Estado provincial y allí, justamente, no se registró ningún caso de muerte materna. "Tupungato, que históricamente ha sido el departamento con mayor mortalidad infantil,  ha revertido esta condición. Esto deja claro cómo nos ocupamos del binomio madre-hijo”, sentenció Crescitelli.

La ministra también expresó que se está trabajando en las normas CONE con el fin de concentrar los partos en los efectores públicos, al mismo tiempo que aseguran desde el Gobierno que se capacitó a los efectores de maternidad en el manejo de emergencias obstétricas. 

Números

Además, aseguran desde la página oficial del Gobierno de Mendoza, se logró un descenso en la tasa de mortalidad infantil: llegó a de 7,51 por mil RN vivos y 20 defunciones menos que en 2016. Y se llegó a cifras inferiores a las nacionales (9,7 por mil RN vivos) en todos los departamentos. Esto muetra que el sistema de salud ha llegado a toda la población con sus servicios.

Los departamentos alejados y que tenían alta mortalidad, como Tupungato, Lavalle y Malargüe, han bajado su tasa y están hoy por debajo de la media provincial. Esto se debe al compromiso de los equipos sanitarios y a la regionalización y significa un avance en la equidad en salud.