Dos temas de política internacional pisan fuerte en la agenda de medios este viernes 10 de junio: por un lado, el ingreso de Argentina a la Alianza del Pacífico como país observador y, por el otro, el diálogo telefónico que tuvieron el presidente Mauricio Macri y su par ruso, Vladímir Putin. Según publica el diario La Nación, la decisión de la Alianza del Pacífico de aprobar en México la solicitud de la Argentina para integrarse a ese bloque como país "observador" fue todo un gesto político: con ello se empezarán a abrir las puertas del Mercosur a un espacio que, hasta hace unos años, era resistido por el eje bolivariano, con el kirchnerismo y el chavismo a la cabeza, por diferencias ideológicas.

De este modo, el pasado miércoles 8 de junio, el gobierno de Macri provocó un gran giro en las relaciones exteriores, ya que durante los mandatos de los Kirchner se vetó cualquier intento de acercamiento con ese bloque, por entender que estaba alineado con Estados Unidos. Además, la decisión de la Alianza del Pacífico de aceptar a la Argentina como "observador" llega en un momento en que Brasil está en crisis. No es un dato menor, dado que los gobiernos de Lula da Silva y Dilma Rousseff siempre se opusieron a un acercamiento con la Alianza del Pacífico, porque entreveían en México un competidor severo desde lo económico.

Mauricio Macri cristalizará este acercamiento con la Alianza del Pacífico el 1.° de julio, cuando viaje a Puerto Varas para sumarse a la cumbre de presidentes de ese bloque, que integran México, Chile, Perú y Colombia. Ayer, tras la XV reunión del Consejo de Ministros de la Alianza del Pacífico, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, dijo que la cumbre que se hará en Chile "tendrá una presencia inédita de al menos dos presidentes" que no pertenecen al bloque: el presidente argentino y su par de Costa Rica, Luis Guillermo Solís.

En tanto, para empezar a darle fuerza a este acercamiento, por ahora sólo político, Macri viajará los próximos 15 y 16 a Colombia, donde se reunirá con uno de los actores centrales de la Alianza del Pacífico: el presidente Juan Manuel Santos. Será una visita de Estado y, a la vez, Macri participará en Medellín del Foro Económico Latinoamericano.

Si bien en la Alianza del Pacífico hay más de 40 países en calidad de "observadores" y, en el Mercosur, Paraguay y Uruguay ya tienen esa categoría, la incorporación de la Argentina es leída como un cambio de vientos en la región y abre la posibilidad de una agilización futura del comercio con Asia, principalmente con China como socio estratégico. Mientras tanto, allegados a la canciller Susana Malcorra expresaron ayer, jueves 9, a La Nación que "no hay que sobredimensionar ni minimizar el hecho de ser observadores de la Alianza del Pacífico, ya que no cambiará para nada la esencia del Mercosur". Así, la Ministra buscó llevar tranquilidad al bloque regional que la Argentina comparte con Venezuela, Brasil, Paraguay y Uruguay.
 

Continuidad

Sin embargo, esta ruptura de relaciones internacionales del gobierno de Macri no impidió que el mandatario continuase con la política exterior "heredada" del kirchnerismo. Ayer dialogó por teléfono durante 20 minutos desde su despacho en la Casa Rosada con el presidente de la Federación Rusa, Vladímir Putin.

"Hablamos sobre cooperación energética, la profundización de las inversiones rusas y confirmamos un encuentro en la próxima cumbre del G-20", escribió Macri en su cuenta de Twitter. De esta manera, ambos presidentes se verán en China en septiembre para una reunión bilateral, previa a la visita de Estado que Macri tiene previsto hacer a Moscú en 2017.

En tanto, según publicó La Nación, se concretó la construcción rusa de la represa Chihuido, en Neuquén, y los avances para la instalación de dos centrales nucleares con tecnología de Moscú. También se habló de la posibilidad de que la gigante estatal rusa Gazprom logre acuerdos con YPF para el desarrollo de gas en la Patagonia.

Asimismo, ambos coincidieron en expandir y diversificar el comercio bilateral. De esta manera, la Argentina busca ser un proveedor confiable de alimentos en Rusia. Esta fue una clara señal de Macri de apoyo a Moscú ante las sanciones económicas que aplicaron Estados Unidos y la Unión Europea a Rusia por la anexión de Crimea. 

También se comprometieron en cooperar en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo, y en intensificar la cooperación en materia de ciencia y tecnología. Por otra parte, Macri le transmitió a Putin su decisión de suspender la señal de TV de noticias Russia Today que se emite en el país para abrir el espectro del sistema TDA a señales de televisión abierta pedidas por las provincias. Nadie quiso decir ayer si Putin y Macri dialogaron de la candidatura de la canciller Susana Malcorra a la ONU, donde el voto de Rusia será clave.