Marcelino Azaguate, artista nacido en Mendoza, fue invitado a tocar en los festejos de la provincia por los 200 años de independencia de la Argentina, donde considera que se produjeron “cuestiones de ambigüedad” porque los pueblos originarios reclaman que la República se formó sobre territorios de esas comunidades.

Azaguate asegura que hay que hacer una nueva lectura de la historia y que "la lucha es para que las cosas sean más justas, para que cada uno tenga lo que por derecho propio se merece, sin importar los partidos políticos".

El músico mendocino de ascendencia huarpe cree que “hay luchas que deben sostenerse” y que “es necesario que conozcamos la historia, porque los pueblos que no conocen su historia y su cultura son pueblos que desaparecen directamente”. En este Bicentenario, dice Azaguate, “debe hacerse un repaso de la historia y que no se oculten cosas. Si hacemos todo el recorrido de ella nos vamos a dar cuenta de que nos han dicho cosas que no son así, y si lo hacemos 500 años para adelante también".

Con esto se refiere a lo que ocurría en las escuelas, donde se enseñaba que los huarpes y otras comunidades habían desaparecido; "En nuestras familias, en las de Mendoza, San Juan y San Luis, nunca se negó que éramos huarpes, pero sin embargo en la escuela no existíamos". De igual forma, "los españoles no nos enseñaron a sembrar, además prohibieron los idiomas", señala Marcelino.

El cantautor folclórico explica por qué cree que ocurre esto con los pueblos originarios: "Lo más grave es que se oculta a propósito porque las leyes de Indias de España decían que no se podían fundar ciudades donde ya había un asentamiento de pueblos originarios; sin embargo, lo hicieron. Entonces si no hay nadie, nos apropiamos también de los territorios. Por eso mismo se oculta, no se hace sin querer, está hecho a propósito, porque si acá no hay nadie, esto es mío".

Además agrega que "el otro tremendo hecho que pasó fue que con la administración del Río Mendoza se terminó el agua en la laguna, entonces se perdió todo un gran ecosistema de la zona en donde se pescaba, se sembraba y todo eso forma parte de nuestra historia como mendocinos. Lo importante es conocer la historia que tenemos, un lugar al que le pertenecemos. Conociendo la cultura y la historia aprendés a querer el lugar, lo sentís tuyo. Con respecto a los sistemas de sembrar, como cuestión cultural a nosotros nos quedaron las acequias que se usaban para después sembrar".

Otro reclamo que hacen estas comunidades es que hay cosas que no se tienen en cuenta, como la Reforma de la Constitución del 94, que los reconoce como preexistentes en Argentina: "Esto que parecen enfrentamientos son para que esta Reforma no sea una letra muerta, sino que sea algo que realmente nos dé herramientas jurídicas para poder acceder a la restitución y devolución de nuestros territorios; también para que se aplique en las escuelas de Mendoza la modalidad nueva para el país, en la que estuve trabajando, que se llama 'educación intercultural bilingüe' y para que existan otras cosas que no están sucediendo pero que están, inclusive, bajo ley, como la Ley de expropiación de los territorios en la provincia, que tampoco se aplica", explica Marcelino. Por esto considera que conociendo la historia vamos a tener una raíz, "porque todos hemos nacidos en América, en Mendoza, ya tenemos una identidad regional al lado de la cordillera de los Andes". 

Sin raíz, cree el músico, "sos dominado por imperios desde afuera, como pasa actualmente". Entonces se pregunta si "realmente somos independientes": "Festejamos con la Filarmónica de Mendoza y el que fue rey de España está presente en los festejos del Bicentenario, son cosas raras. Si estamos bien plantados en la historia estas cosas no van a pasar tan desapercibidas. Si viene el rey que, venga con la voluntad de decir: 'Vengo porque les quiero devolver todo lo que le hemos robado a América'".

Con respecto a los gobernantes y a las autoridades, Marcelino cuenta que distintas gestiones de diferentes partidos políticos han tenido algunas voluntades, pero él cree que las voluntades tienen que estar acompañadas de "los de más arriba, porque la voluntad política más fuerte es la del gobernador", aunque haya ministros que acompañen. Asimismo, da un ejemplo de una situación que ocurió en el gobierno de Celso Jaque cuando se restituyeron 72 mil hectáreas en la zona de la laguna de Guanacache "y eso no salió en ningún lado. Fue un hecho histórico, no sólo en Argentina sino en América: una restitución por la voluntad política de un gobierno, no importa el partido político".

Una de las cosas que fortalecerían la cultura de los pueblos para Azaguate, "en las que hay que poner energía con los políticos que hay y los que vengan", es por ejemplo "el trabajo de una profesora de la Facutad de Filosofía sobre un diccionario hecho por un cura en el año 1600 donde están las dos lenguas huarpes, más otras cosas encontradas en un archivo en Perú con las que hizo un trabajo increíble con fonética, con cosas que nosotros queremos empezar a meter en las escuelas". Para el artista de proyección internacional, la situación de los pueblos originarios es similar en todo el país y prefiere ser positivo con estos temas, porque aclara que "cuando era chico, los huarpes estaban desaparecidos, pero ahora ya tenemos un lugar, entonces formamos parte de un proceso histórico de luchas heredadas que es lento pero que sin embargo viene avanzando. En eso yo soy optimista totalmente".