El jefe de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual, Alejandro Iturbide, pidió 45 años de prisión para los sacerdotes Nicola Corradi (83) y Horacio Corbacho (59) acusados de abusar y corromper a los niños y niñas que asistían a la sede local del Instituto Antonio Próvolo. La novedad la confirmó el querellante, Oscar Barrera.

El fiscal solicitó una pena menor para el tercer acusado en la causa, se trata del jardinero Armando Gómez, para quien solicitó 22 años y medio de prisión. Esto atendiendo a su edad, a su analfabetismo a discapacidad, ya que es sordo, y que no tenía el poder de los sacerdotes dentro dela estructura del Próvolo. 

Durante la audiencia de este martes, concluyeron sus alegatos los representantes del Ministerio Público Fiscal y los querellantes por Xumek, Sergio Salinas y Lucas Lecour.

Al finalizar la jornada, los fiscales Iturbide y Stroppiana brindaron una conferencia de prensa en la que aseguraron que teniendo en cuenta las pruebas con que cuentan existe certeza de que los hechos ocurrieron y que las víctimas padecieron las vejaciones que denunciaron. 

"Son hechos gravísimos. Tenían la oportunidad de hacer de ese Instituto algo bueno para estos chicos y lo arruinaron todo", fueron las plabras del Iturbide. 

El fiscal explicó que los informes de todos los profesionales que evaluaron a los chicos y chicas determinaron que los relatos son veraces, que no mienten y que no persiguen ningún fin ganancial, además de que hubiera sido imposible -recalcó- engañar a especialistas tanto del Cuerpo Medico Forense como del Equipo de Abordaje de Abuso Sexual (Edeaas). 

El jefe de la unidad de delitos contra la integridad sexual detalló que sostuvo 25 de los 28 hechos que se les imputaron a las tres personas. Corbacho mantiene las 16 acusaciones, pero dejó de lado 2 de las 6 que implicaban a Gómez y una de Corradi, porque aseguró que no tenía las pruebas suficientes para sostenerlas. Y recalcó que esta es una muestra que no se trata de acusar por acusar, sino de contar con pruebas contundentes. 

El padre de dos exalumnos dijo que lo amenazaron directivos del Próvolo

El padre de dos exalumnos del Instituto Próvolo dijo que las autoridades lo amenazaron cuando planteó algunas dudas y pidió explicaciones por comportamientos atípicos de sus hijos. Contó que le aseguraron que si hablaba, si decía algo que no correspondía, lo iba a denunciar y que incluso le preguntaron si su hijo era homosexual.

Pedido de condena y perdón de la Iglesia

Los querellantes Sergio Salinas y Lucas Leocour  adhirieron al pedido de condena del Ministerio Pùblico Fiscal y solicitaron al Tribunal que ordene medidas de reparación para los denunciantes. Entre las más importantes: que la Iglesia Católica pida perdón a las víctimas, que se coloque una placa en el predio del Próvolo (donde hoy funcionan dependencias de la comuna de Luján de Cuyo) recordando a los alumnos que sufirieron vejaciones, que denuncie el Concordato que la Iglesia firmó con el Estado y que la habilita a realizar las investigaciones canónicas, en la que no tienen ninguna participación los denunciantes.

Salinas y Lecour también solicitaron asistencia psicológica gratuita para los sobrevivientes, atención integral, posibilidades de empleo, que se garantice el acceso a la educación en los distintos niveles, que se hagan efectivas las leyes que exigen la existencia de lengua de señalas en los establecimientos educativos, entre otros aspectos.

El juicio continuará mañana con los alegatos de los querellantes Oscar Barrera y Leandro Lanci y posterioremente será el turno de la defensora oficial, Alicia Arlotta. Luego, el Tribunal tiene hasta 15 días hábiles para dictar sentencia. 

Próvolo: pedirán la pena máxima de 50 años para los acusados

Los representantes de los sobrevivientes del Instituto Antonio Próvolo pedirán la pena máxima de 50 años para los sacerdotes y el jardinero acusados de abusar y corromper a once niños y niñas sordas que asistían a esa institución. Así lo aseguraron los querellantes Sergio Salinas y Oscar Barrera.