Los abogados de las monjas Kumiko Kosaka y Asunción Martínez, Carlos Varela Álvarez y Valeria Corbacho, imputadas en la causa que investiga los abusos sexuales a niños hipoacúsicos del Insituto Antonio Próvolo, denunciaron penalmente a intérpretes oficiales por tergiversar testimonios y al Cuepo Médico Forense por no tener en cuenta informes psicológicos y auditivos de los niños.

La defensa de las religiosas denunció a los intérpretes de lenguaje de señas de tergiversar y manipular los testimonios. Se realizaron 7 cámaras Gesell y en 5 habría ocurrido el falso testimonio. Además, los acusaron de dar consejos a los medios de comunicación sobre cuál era la mejor manera de traducir e interpretar lo que los chicos expresaban. 

La denuncia fue presentada ante la Unidad Fiscal de Delitos Sexuales por los abogados de las monjas Kumiko Kosaka, imputada y detenida por los episodios de abusos sexuales y corrupción de menores sordos que se investigan en el instituto, y Asunción Martínez, imputada pero no detenida, también por tener participación en los hechos.

En cuento al Cuepo Médico Forense, se lo acusa de no tener en cuenta informes del Gobierno sobre tratamientos psicológicos de los niños y por no hacer estudios sobre el porcentaje de audición de los niños.