La Asociación Mendocina de Profesionales de la Salud, Ampros, realiza desde este miércoles un paro que durará 72 horas. Profesionales de la salud, como personal de planta efectiva, prestadores y contratados, reclaman mejores condiciones salariales. Las cirugías programadas se suspenden por el plazo de tres días. El jueves 18 de febrero realizarán una concentración en el nudo vial a las 8.30.

La huelga sin asistencia a los lugares de trabajo de profesionales de planta efectiva, prestadores, contratados o bajo cualquier otra modalidad precarizante continuará hasta el 19 a las 24, con el objetivo de reclamar que se cumpla lo firmado por el Gobierno de Mendoza en la última paritaria del sector, acerca del aumento salarial y el cronograma de regularización de quienes luchan en la primera línea de batalla contra la COVID-19, explicó el gremio.

Los servicios esenciales serán cubiertos por ministros, directores de hospitales, directores de centros de salud, subsecretarios de salud, coordinadores de áreas, para dejar a resguardo la salud de la población, aclaró Ampros.

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María Isabel Del Pópolo, secretaria general de Ampros, explicó: “No podemos dejar de advertir que la forma de contratación señalada, contraria al ordenamiento normativo, ha impedido a los profesionales de la salud que trabajan en estos servicios de vital importancia gozar de beneficios tales como vacaciones, seguridad social, ART, aumentos equivalentes al resto de la población sanitaria, descansos, resguardo ante hechos incapacitantes, licencia y protección por maternidad”.

Ampros realizó un paro de 48 horas los días 5 y 6 de febrero pasado. Las y los profesionales reclamaron que se cumpla lo firmado por el Gobierno de Mendoza en la última paritaria del sector. En este sentido, reclaman el aumento salarial prometido y el cronograma de regularización de quienes siguen en la primera línea de batalla contra la COVID-19.

Claudia Iturbe, secretaria adjunta de Ampros, concluyó: “Además de lo mencionado, se agrega la falta de aumento a los prestadores, pérdida de poder adquisitivo ante los impuestazos y pésimas condiciones laborales en las que se desempeñan nuestros profesionales en muchos efectores de salud”. 

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