La Asamblea General de Naciones Unidas emitió hoy una nueva condena al bloqueo impuesto por Estados Unidos contra Cuba desde hace casi medio siglo.

Lo hizo al aprobar por 186 votos a favor el proyecto de declaración que reclama el levantamiento del bloqueo comercial y económico que Estados Unidos impone a Cuba desde 1962.

Esta es la vigésima vez consecutiva que el organismo reclama, a pedido de Cuba, el levantamiento de la medida política, que en esa ocasión reunió 186 votos a favor, dos en contra y tres abstenciones, según informó la cadena Telesur.

A propósito  de esto Follari reflexionó que el bloqueo “en primera instancia se trata de una medida que es un castigo ideológico que responde a criterios de la Guerra Fría y que deberían estar totalmente superados. Me parece un poco insólito que a esta altura de la historia se mantenga este tipo de bloqueo, que por cierto afecta las condiciones económicas generales de toda Cuba, por lo tanto trae consecuencias en todos los niveles. Tanto en servicios como en los niveles básicos de la producción, porque evidentemente afecta también a toda la inversión en infraestructura”.

Sin embargo el catedrático aseguró que “tampoco todos los problemas económicos que padece Cuba son a causa del bloqueo económico” y en tanto observó que “a veces se unilateraliza esto, pero debe haber otros inconvenientes que se puede deber a como internamente maneja su economía Cuba. Pero ciertamente el bloqueo es un elemento anacrónico, un castigo ideológico y absolutamente perjudicial para el gobierno y el pueblo cubano en todo sentido”.

Esta será la tercera condena de la ONU desde la llegada del actual presidente, Barack Obama, a la presidencia estadounidense. Con respecto al papel que cumple Barack Obama, quien, entre otras cosas había prometido levantar el bloqueo a Cuba, Follari insistió que “Obama ha mentido en todas sus promesas, o si no mintió creo que no las ha podido o no las ha sabido cumplir. Lo mismo pasó con los levantamientos de las bases militares en el territorio cubano de Guantánamo. Esto es absolutamente inadmisible a esta altura de los tiempos, una especie de enclave territorial colonial en un país ajeno”.

En tanto de la intervención que realiza Estados Unidos en distintos lugares del mundo Roberto aseguró que “seguramente corresponde exigirle una menor injerencia en asuntos internos de otros países. Ya que no se trata de una concesión ni nada por el estilo, se trata de una cuestión de derecho internacional. El bloqueo a Cuba es un anacronismo inaudito, fuera de lugar e imposible de fundamentar y sostener racionalmente”.

Por último el sociólogo hizo una reflexión sobre los presos políticos de Cuba en Estados Unidos, acusados de terrorismo “sería apropiado que hubiera juicios transparentes para estas personas cubanas y no este tipo de acusaciones y este tipo de encierros que Estados Unidos practica contra personas que ellos acusan unilateralmente de sospechosas de terrorismo”.  Y aseguró que “la exigencia que está haciendo de la libertad de estas personas es compartible, salvo que se demostraran las acusaciones que no han sido demostradas ni parece que Estados Unidos tuviera las herramientas para hacerlo”.