El diputado nacional Jorge Enríquez ya había pedido no tomar “a la ligera” lo que calificó como “una amenaza gravísima” expresada por el diputado nacional kirchnerista Rodolfo Tailhade, quien el viernes afirmó que “los jueces y fiscales que están en esto las van a pagar”. “Se trata de una amenaza gravísima, que no puede tomarse a la ligera en un país en el que fue asesinado un fiscal federal por investigar a la expresidente de la Nación. ¿Qué quiere decir? ¿De qué forma las van a pagar? Lo único cierto es que ahora sabemos bien quiénes las pagaban: eran los empresarios amigos del poder, y lo hacían a través de bolsos llevados impúdicamente a la Casa de Gobierno y a la Quinta de Olivos, convertidos en refugios de la más abyecta criminalidad”, señaló el legislador del PRO, que consideró las amenazas de Tailhade como “el gesto desesperado de una banda que advierte su irremediable caída”.

Pero no se quedó ahí Enríquez, y presentó ahora un proyecto en el que pide excluir de la Cámara de Diputados a Rodolfo Tailhade. Se basa en el artículo 66 de la Constitución nacional “en razón de sus manifestaciones públicas sobre el juez federal Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli”, señala en la iniciativa. Allí precisa que esas expresiones “implicaron una amenza contra ellos y una lesión al principio de división de poderes, y comportan, por ello, una inconducta grave que afecta el decoro y la honorabilidad de la Cámara ante la sociedad argentina y los restantes poderes del Estado”.

El proyecto fue acompañado por sus pares del PRO Alicia María Fregonese, Graciela Ocaña, Javier Pretto, María Carla Piccolomini, Fernando Iglesias y Cornelia Schmidt-Liermann, quien consideró que lo que hizo Tailhade “es muy grave, sobre todo con un fiscal asesinado y buscando volver a la moral y la Justicia”. “Es hora de poner orden –agregó Schmidt-Liermann a través de su cuenta de Twitter–. ¡Debemos marcarle la cancha a los violentos!”.