Micaela García tenía 21 años y había sido vista por última vez durante la madrugada del domingo 2 de abril. Esta mañana, sábado 8, su cuerpo fue encontrado en Gualeguay, Entre Ríos. Sebastián Wagner es el principal sospechoso. El hombre había estado preso por dos abusos sexuales cometidos en 2010, pero el juez Carlos Rossi le dio la libertad condicional en julio del año pasado.

El nombre y las fotos de Micaela García circularon por los medios de comunicación y las redes sociales durante la última semana. Es que la joven había desaparecido en la madrugada del domingo 2 de abril alrededor de las 5.30, luego de haber ido al boliche King de Gualeguay, localidad de Entre Ríos, de donde era oriunda.

Después de una semana de intensa búsqueda, el cuerpo sin vida de Micaela fue encontrado en la Estancia Seis Robles, de Gualeguay. El hallazgo se produjo en la mañana de este sábado 8, mientras efectivos policiales realizaban rastrillajes. El cadáver fue trasladado a la morgue judicial para que se realicen las autopsias correspondientes.

Anoche (viernes 7) había sido detenido el principal sospechoso del femicidio de Micaela, Sebastián José Luis Wagner, de 30 años, quien tiene antecedentes penales por dos abusos sexuales. Además, se acusa al juez Carlos Alfredo Rossi, quien benefició a Wagner con la libertad condicional por “buena conducta”.

Según La Voz del Interior, Wagner había sido señalado en el caso de la desaparición de Micaela García por sus antecedentes y porque su auto fue captado por cámaras cerca del lugar donde la joven había sido vista por última vez.
 

Los antecedentes de Sebastián Wagner

El diario Clarín dedicó una nota exclusivamente al perfil del principal sospechoso de haber asesinado a Micaela. En ella se detalla que, en 2010, el hombre había violado a una estudiante después de golpearla y robarle en su casa. Cuatro meses después, forzó a una chica a subir a su auto y la llevó a un parque donde volvió a cometer una violación.

Sebastián Wagner, principal sospechoso por el femicidio de Micaela García. Foto publicada por Clarín.

Por estos dos abusos, Wagner recibió una pena de nueve años en prisión. Dos años después se conoció otro caso de violación que lo incriminaba, pero no se pudo comprobar su culpabilidad en la Justicia, ya que el violador estaba encapuchado y, ante la prueba del ADN, Wagner culpó a su hermano gemelo.

El hombre había cumplido sólo cuatro años de condena cuando el juez de Ejecución de Penas de Gualeguaychú, Carlos Rossi, le dio la libertad condicional, a pesar de que el Servicio Penitenciario no lo recomendaba.

Por ello, el magistrado también es acusado como culpable de la muerte de Micaela García, ya que si Wagner no hubiese sido liberado en julio de 2016, el crimen de la joven se habría evitado.

Micaela es una víctima de la expresión máxima de la violencia machista que es el femicidio, y que se suma a una triste y larga lista de nombres de mujeres que han sufrido la violencia de género. 

Durante este fin de semana se realizaron marchas en todo el país, en un nuevo reclamo de Ni Una Menos por el femicidio de Micaela. En Mendoza, la concentración también se realizó en pleno centro.