El martes 29 de agosto, durante el programa Animales Sueltos, la periodista Romina Maguel contó que la provincia podría albergar a presos sentenciados por casos de corrupción en la Cárcel Federal de Cacheuta. De hecho, la periodista aseguró que varios detenidos lo estaban considerando. La noticia corrió como reguero de pólvora, pero el Gobierno la desmintió.

Eduardo Orellana, el titular del sistema penitenciario, explicó a Unidiversidad que la Cárcel Federal de Luján está pensada para albergar a presos de mínima peligrosidad y que el planteo del programa porteño no tiene solvencia: la causa principal es que implicaría grandes gastos de dinero. “Hay una cuestión básica: la autoridad que investiga, el imputado y el defensor no pueden estar a más de 50 kilómetros de donde está la cárcel. Desde ese punto de vista, es un disparate”, sentenció.

“Es una bomba de humo. No sé de dónde lo sacó. Es raro porque es una información que yo debería manejar mejor que nadie”, aclaró Orellana, quien especificó que durante la próxima semana habrá nuevos traslados de internos al penal, que tiene una capacidad para 700 personas. “En 2019, el penal estará operativo de manera total”, recordó.

La periodista Romina Maguel recordó que las cárceles de Ezeiza y Marcos Paz están colapsadas y ambos se encuentran comprendidos dentro del Sistema de Intervención para la Reducción de Índices de Corruptibilidad (IRIC). Se trata de un registro que depende de un seguimiento del personal penitenciario en el cual los elegidos para custodiar a los procesados entregan al sistema la potestad de controlar sus bienes y se someten a una intensa capacitación.

La obra

La construcción se reanudó a principios de 2018 y lleva un avance del 60 %. Son 34 000 metros cuadrados donde residirán los presos de la Justicia Federal y los de la Justicia provincial. La primera etapa quedó inaugurada y, a principios de agosto, el penal ya comenzó a funcionar.

El diseño de la obra tuvo en cuenta el concepto de cárcel como un lugar de reinserción social y no de reclusión. De esta manera, se tienen previstos sectores destinados a la educación y al trabajo, y sectores diferenciados para procesados y condenados. De acuerdo a lo que informa la página de Prensa de Gobierno, en los 32 000 metros cuadrados de superficie bruta, confluirán el Instituto Penitenciario Federal de Cuyo para varones, con 392 plazas; el Instituto Correccional de Cuyo para Mujeres, con 112, y el Instituto Abierto, con capacidad para 32 internos.

Un viaje al interior de la Cárcel de Cacheuta

Unidiversidad te muestra, en un interactivo, algunas de las características del nuevo complejo federal penitenciario. Cornejo aseguró que cuando inició su gestión, la obra tenía el 27 % de avance. Un centro de detención pensado con base en la ...