La causa por la desaparición de Johana Chacón, en la que se investiga el delito de trata de personas, continúa abierta en la Justicia Federal y aún quedan hipótesis por seguir. Así lo confirmó el fiscal Fernando Alcaraz, quien explicó que intentará concluir su labor antes de fin de año.

La investigación se inició en marzo de 2014, dos años después de la desaparición de la adolescente lavallina y tres después de la de Soledad Olivera. Fue un logro de los docentes y directivos de la escuela Virgen del Rosario, de Lavalle, que solicitaron la apertura de una causa paralela a la de la Justicia provincial. Fundamentaron su solicitud en que nunca se investigó debidamente la posibilidad de la trata de personas, un delito federal.

En el ámbito federal se inició una sola causa por Olivera y Chacón con la hipótesis de que ambas jóvenes podrían haber sido captadas por una red de trata de personas con fines de explotación sexual. La razón para unificarlas fueron los puntos en común entre ambos casos: dos mujeres de las que nada se sabe, en el mismo espacio temporal, lugar físico y contexto y con personas en común en su círculo cercano.

El abogado a cargo de la Fiscalía Federal N.° 2, Fernando Alcaraz, seleccionó a un pequeño grupo de investigadores de la Justicia mendocina para llevar adelante la pesquisa y le dio dos premisas claras: reserva de toda la información y reportar las novedades directamente a él.

Alcaraz tomó nuevamente testimonio a personas que ya habían declarado ante la Justicia provincial y que incluso participaron como testigos en el juicio por la desaparición de Olivera. En uno de esos encuentros, Beatriz Chacón (hermana de Johana) aseguró que su expareja, Mariano Luque, asesinó a la adolescente, quemó su cuerpo, lo enterró en la finca donde vivían y poco después trasladó los restos a un lugar que dijo desconocer.

El fiscal federal informó de inmediato la novedad a su par local. Esa declaración cambió el curso de la causa Chacón, ya que la Justicia provincial lo imputó por homicidio y hoy permanece detenido.

Alcaraz explicó a Unidiversidad que la investigación federal continúa abierta, que ya cerraron algunas hipótesis, pero que aún falta analizar otras.

El fiscal comentó que citaron a testigos que ya declararon, a otros que nunca dieron su versión ante la Justicia y que incluso los pesquisas viajaron a otras provincias para seguir líneas de investigación sobre personas que podrían haber captado a las jóvenes con fines de explotación sexual.

Alcaraz recalcó que agotará todas las hipótesis y adelantó que la intención es concluir la investigación a fin de año.