"No se puede pedir reconocimiento aniquilando al otro, porque esto lo único que despierta es mayor violencia y división", aseguró el Papa ante las miles de personas que asistieron a la misa en esta región que ha sufrido en la última madrugada varios ataques incendiarios, barricadas y emboscada a policías.

Los ataques dejaron un policía herido, tres templos católicos y uno evangélico con daños de diversa consideración, y vandalismo a tres helicópteros de empresas forestales, según autoridades chilenas. Los autores dejaron panfletos en las iglesias alusivos a la demanda mapuche que exige la restitución de territorios ancestrales, hoy en manos privados.

"Es imprescindible reconocer que una cultura del reconocimiento mutuo no puede construirse en base a la violencia y destrucción que termina cobrándose vidas humanas", dijo el pontífice en la "Misa por la integración de los pueblos".

Temuco, prendida fuego ante la llegada del Papa

Los ataques fueron contra una capilla, una barricada en una ruta y tres helicópteros. Hoy Francisco celebrará su segunda Misa por los progresos de los pueblos.

Francisco defendió las reivindicaciones de los mapuches, y abogó por la unidad y una mayor inclusión de los pueblos originarios de Chile. Al mismo tiempo exigió el fin de la violencia que "vuelve mentirosa la causa más justa"

Tras la misa el papa almorzó con representantes mapuches de la Araucanía, entre los comensales se encontraban el representante del pueblo mapuche de la comunidad de Boyeco Sebastián Cayuelo; y el miembro de la comunidad de Nehuentúe, Ruben Nahuelpán.

Voceros indígenas criticaron poco compromiso del papa con el pueblo mapuche

En una entrevista para teleSUR el vocero del Consejo de Todas las Tierras en Temuco, Aucán Huilcamán, lamentó que el papa Francisco no expresara su compromiso con el pueblo mapuche y criticó su discurso por estar basado en "palabras generales que no dicen nada en relación al pasado y al pueblo mapuche”.

El vocero indígena aseguró que el sumo pontífice no mostró un "compromiso claro y sincero" y lo comparó con el fallecido Juan Pablo II, quien en su momento "motivó a que el pueblo mapuche promoviera sus derechos y los defendiera".

Asimismo, denunció que el Vaticano "tiene responsabilidad en el pasado y presente y en esta oportunidad a coayudado al Estado chileno y argentino a omitir responsabilidades con el pueblo mapuche". Además señaló que la Iglesia católica "tiene conflicto de intereses en las tierras de los pueblos mapuches, debido a que tiene más aguas inscritas en leyes que provienen de la dictadura militar, como también tierras patrimoniales".