El sismo tuvo, para el gobernador Francisco Pérez, un aspecto positivo: sirvió como excusa para explicar por qué no se realizaría el encuentro entre el primer mandatario y el gobernador electo Alfredo Cornejo. 

La reunión tenía como fin presentar el proyecto de endeudamiento y enviarlo a la Legislatura, para su debate. Pero no sucedió. 

Lo cierto es que en el PJ hay serios desencuentros con respecto a la iniciativa de ambos gobernadores. Un ala dura de este partido, compuesta por los azules e Integración Peronista (los seguidores de los hermanos Félix de San Rafael), además de algunos kirchernistas puros, no quieren que Pérez le allane el camino al próximo titular del Ejecutivo.

La razón se puede comprender de cara a las generales de octubre, puesto que la única consigna para el PJ local es congraciarse con Scioli, diferenciándose de Macri, que en la Provincia encarna el Frente Cambia Mendoza. Pero hay un motivo más bien local: los peronistas culpan a Cornejo del descontrol financiero que tiene el gobierno en el fin de la gestión, porque no les permitió el endeudamiento.

Si Paco mandaba hoy el proyecto a la Casa de las Leyes, con este panorama interno en el justicialismo, se arriesgaba a destapar la olla de su partido, que al parecer viene hirviendo desde el 21 de junio.
 

El panorama legislativo

Todos los partidos con representación parlamentaria están a la expectativa, pero el proyecto para permitir que Mendoza se endeude en 6000 millones de pesos no aparece. Si bien la versión oficial es que nadie sabe realmente por qué el Ejecutivo no manda la iniciativa, la versión apócrifa apunta a dos trabas específicas: una es la falta de acuerdo entre los peronistas para aprobarlo. La otra, es que el borrador del proyecto se ha convertido en una especie de almacén de ramos generales.

“Vamos a ir a pedir plata al Nación, pero no revisamos ni un pase a planta de acá a dos años hacia atrás, y nos levantan el pulgar para la democratización de Osep”. Dicen que en estos términos negocia el oficialismo y que esto no ha caído nada bien a los cornejistas. Por lo tanto, no hay humo blanco.

De todas maneras, queda una instancia: mañana el jefe de Diputados, Jorge Tanús, se va de vacaciones, y ese parece ser el santo y seña para que ingrese la iniciativa a la Cámara Baja.
 

La versión oficial

Silvia Ramos, presidenta del bloque PJ de Diputados, aseguró que no tienen ningún dato sobre el contenido del proyecto, ni sobre cuándo ingresará. “Supuestamente será mañana, pero no nos han asegurado nada”, sostuvo la peronista afín al sector de Félix.

Sobre el tema del desacuerdo que parece haber dentro de su bloque con la iniciativa que enviará a Pérez (y que favorecerá al nuevo gobierno), Ramos dijo que no es tan así, y que primero deben discutir el contenido y las condiciones del endeudamiento. En otras palabras, primero quieren enterarse de qué se trata.

"No tenemos novedades, no sabemos cuáles son las condiciones, no podemos adelantar nada. Pero si las condiciones del Gobierno incluyen que no se toquen los pases a planta, desde ya adelanto que el tema va a ser conflictivo”, sostuvo el presidente del bloque del PD, Rómulo Leonardi.

Por parte del FIT, quien habló fue Héctor Fresina (PO). El legislador aseguró que no están de acuerdo con contraer deuda. Más bien sostuvo que hay que cobrar los impuestos a los empresarios, dejarlos sin subsidios y beneficios y que con esto se podría financiar el rojo que tiene la Provincia.

En cuanto a los radicales, desde este espacio dijeron que creen que el proyecto no ingresa por falta de consenso.
 

Los conflictos

El bloque en donde no hay arreglo para una postura unificada es el PJ. Si bien una fuente radical confirmó que son ellos los que están hablando tanto con los peronistas del sur como con los azules para que ablanden su postura, no pueden avanzar sobre temas que son estrictamente partidarios.

Por otra parte, explicaron que en el radicalismo no quieren dejar pasar los pases a planta sin revisarlos, y tampoco aceptan dar el visto bueno al proyecto de la llamada democratización de la Osep. En cuanto a esto, el trasfondo es muy complicado. Al parecer, el lugar que se elegirá por el voto de los afiliados quedaría para los sindicalistas de ATE y esto será muy conflictivo para la gestión de Cornejo.

En este panorama, el proyecto de endeudamiento está aún en veremos.