Juntas, nos queremos vivas y listas para luchar

Organizaciones, agrupaciones políticas, ciudadanas y ciudadanos dijeron basta de femicidios y de violencia contra las mujeres.

Juntas, nos queremos vivas y listas para luchar

Foto: Axel Lloret

Sociedad

#NiUnaMenos

Unidiversidad

Unidiversidad / Amira Ascar. Fotos: Axel Lloret.

Publicado el 03 DE JUNIO DE 2016

Este viernes 3 de junio, en todo el país, se desarrolló la segunda marcha bajo el lema de #NiUnaMenos en repudio a la violencia de género. En Mendoza, ni el frío y ni la lluvia detuvieron a la multitud que salió de la comodidad de sus hogares a manifestarse. La convocatoria fue menos multitudinaria que la de hace exactamente un añ, pero la lucha sigue en pie.

La movilización fue convocada a las 17 en San Martín y Peatonal. La principal avenida de la ciudad estaba repleta de agrupaciones políticas, organizaciones contra la violencia de género y ciudadanía. Bajo la incesante lluvia, muchas de las personas autoconvocadas pegaron pancartas en sus propios paraguas, mientras que otras con banderas y carteles desteñidos coreaban el lema "Ni una menos, juntas nos queremos vivas".

 

 

Recién a las 18.30 la multitud empezó a marchar hacia la Avenida Las Heras. Luego del desfile de carteles y banderas por las principales calles del centro mendocino, se congregó en la Legislatura. Una vez que llegó a destino, en Peatonal y Patricias Mendocinas, se usó la parte trasera de una camioneta como escenario para comenzar el acto.

 

Primero, los familiares de víctimas de violencia de género hablaron desde su dolor, algunos al borde del llanto, otros con la voz quebrada. Todos pidieron justicia por las mujeres asesinadas y desaparecidas tanto a nivel provincial como nacional. No olvidaron mencionar a Johana Chacón ni a Soledad Olivera.

Luego fue el momento de las agrupaciones políticas. A través de dos cartas se intentó resumir los reclamos de diversos sectores. Un documento pertenecía a la izquierda, el Partido Comunista y otras organizaciones afines. El otro texto representaba al Frente para la Victoria y allegados.

Si bien había diferencias en los enfoques, ambos reclamos coincidían en detener la violencia machista contra las mujeres. Se pidió por el aborto legal, seguro y gratuito, como una forma de no perder a ninguna más por estas causas. Por último, reclamaron la renuncia inmediata de Jaime Correas, el titular de la Dirección General de Escuelas (DGE), por “maltratador y violento con las mujeres”.

 

Adrián Mateluna, secretario general del Sindicato Unido de los Trabajadores de la Educación (SUTE), repudió a este funcionario. “Nosotros nos habíamos juntado anteriormente con el movimiento de las compañeras del Frente de Mujeres para presentarles y que vieran el documento, que decía claramente que Jaime Correas era un maltratador, especialmente con las mujeres. Esto va en nivel creciente con las exigencias del pueblo para que el Estado se haga cargo de todo aquello de lo que tiene que hacerse cargo para dar igual”, le dijo el dirigente a Unidiversidad.

Para concluir el acto, Nelly Rojas, de la Tupac Amaru, dio un discurso conciliador, que intentaba disolver las diferencias entre agrupaciones. Explicó que no es momento de divisiones, que en estas causas se necesita que todas las fuerzas políticas y civiles “tiren” para el mismo lado.

Rojas cuestionó a la vicegobernadora Laura Montero por tener en su gabinete a un funcionario como Correas. “La vicegobernadora, como mujer, debería comprometerse con la causa y echar a patadas a Jaime”, reclamó la dirigente. Ovacionada con aplausos, concluyó su discurso instando a todos a seguir luchando día a día.

En contraposición al punto de vista de la Tupac Amaru, Natalia Ochoa, directora de Género y Derechos Humanos de Las Heras, habló de un cambio en las políticas públicas y culturales de la actual gestión. “El Estado tiene que garantizar las condiciones para que la mujer pueda vivir sin violencia. También estamos haciendo redes en todo el municipio para que se hablen de las temáticas”, argumentó.

El 3 de junio no se conmemora como una celebración. Lejos de esto, #NiUnaMenos resulta ser un recordatorio anual de una problemática que nos atañe a todos y a todas. La violencia contra las mujeres no sólo se ve en las desapariciones y asesinatos de inocentes sino también en la vida diaria. Desde malos tratos, insultos, abusos de poder, hasta las imágenes difundidas por los medios y las publicidades.

Al respecto, Milagros Molina, integrante de la Coordinación Feminista de Mendoza, sostuvo que las agresiones más difundidas son emitidas por los medios de comunicación. Sobre todo cuando “las víctimas son pobres y madres”, ya que se las culpabiliza de “problemas estructurales y coyunturales”.

A pesar de las posturas disímiles, estas movilizaciones populares demuestran que hay causas por las que es necesario luchar en común. En 2015 y en estos seis meses de 2016, fueron 275 los femicidios cometidos.

Si bien es necesaria la intervención del Estado para amparar a las víctimas de violencia de género, también es fundamental contar con una legislación efectiva para abordar el tema y con un cambio cultural. La meta es alta y el camino es largo, pero como muchas mujeres y hombres coreaban en la marcha, “la lucha es diaria y no se entrega”.