El expresidente de Uruguay Jorge Luis Batlle Ibáñez falleció el lunes 24, luego de estar internado desde el 13 de octubre a causa de una caída que le causó un hematoma intracraneal por el que debió ser operado. Batlle fue trasladado al Sanatorio Americano y permaneció en coma desde ese momento. Su estado de salud no mejoró y se mantuvo como un paciente grave, indicaban los reportes diarios del sanatorio. Con el paso de los días, los médicos decidieron comenzar a quitarle los sedantes. Sin embargo, la respuesta fue desalentadora, ya que no reaccionó de forma favorable.

El jueves 20 por la noche se anunció que Batlle tenía un daño cerebral severo. "Lamentablemente, el esfuerzo realizado por todo el equipo de salud no fue suficiente para revertir el cuadro clínico en el que ingresó el Dr. Batlle tras el suceso que vivió días atrás", agregó el informe médico.

Entre las 8 y las 15 de este martes se realizará el velatorio del exmandatario en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo uruguayo. Luego, el cortejo fúnebre se dirigirá hacia el Cementerio Central, pasando por la sede del Partido Colorado, del que fue miembro.

En tanto, el Gobierno decretó para este martes duelo oficial con honores fúnebres de presidente, bandera a media asta en edificios públicos, embajadas en el exterior, cuarteles, fortalezas, bases aéreas y buques de guerra. "El Gobierno destaca la defensa de los valores democráticos del exmandatario y legislador de amplia trayectoria, así como su compromiso por el país", expresó el comunicado de Presidencia.

Por su parte, el actual presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, declaró en el inicio del velatorio que “ha sido un político importantísimo e influyente en la historia de nuestro país”, aseverando que marcó toda una época, convencido de sus ideales y pensamientos. Además agregó que fue un político de élite, de estirpe, de fuste, y así honró y vivió su vida hasta el último día.

Vázquez destacó su figura al despedirlo "con un enorme respeto y un sentimiento de honor real desde lo más profundo", dijo en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo. "Hoy aquí lamentablemente, y esta es la parte difícil, tenemos que despedir a una de las personas más inteligentes que he conocido en mi vida. Quedará grabado no sólo en los muros de este palacio sino en la mejor historia de nuestro país. Hasta siempre", concluyó el mandatario.

"Manga de ladrones"

A mediados del año 2002, Jorge Batlle estuvo en el centro de la escena mediática de la Argentina por una polémica frase lanzada en una entrevista para la televisión: "Los argentinos son una manga de ladrones, del primero hasta el último". Los dichos del expresidente uruguayo rebotaron por todo el país, al punto de que tuvo que reunirse con el entonces mandatario argentino, Eduardo Duhalde, para disculparse.