El histórico dirigente peronista falleció a los 92 años tras una carrera política de más de 70 años, en la cual ocupó diferentes cargos, entre ellos el de gobernador bonaerense.
Todos recuerdan a Antonio Cafiero en Mendoza. Así como se recuerda que apuntaló a Raúl Alfonsín en las sublevaciones militares, también se lo rememora en esta provincia porque cuando fue interventor federal mandado por Isabel Perón, puso a cargo de la Policía de Mendoza al brigadier Julio César Santuccione, el que moldeó a la fuerza para transformarla en parte del aparato represor que tuvo su apogeo durante la dictadura.
Antonio Cafiero estaba internado desde hacía 10 días por un cuadro de neumonía y falleció durante la mañana del lunes 13 de octubre, según confirmó su nieto Santiago Cafiero a Télam.
Su hijo Juan Pablo, actual embajador en el Vaticano, también confirmó que el deceso ocurrió a las 7.20 del lunes. Estaba en terapia intensiva en la clínica Las Lomas por una afección pulmonar. "Había ingresado con un problema respiratorio del que no pudo salir", explicó su hijo.
Sus familiares viajan ahora hacia Buenos Aires para despedir sus restos. Aún no está decidido si habrá una ceremonia para despedirlo, indicó el embajador argentino desde Roma.
Historia
En 1988 Antonio Cafiero fue precandidato a presidente de la Nación por el peronismo. En la que fue la última gran elección interna del PJ, el dirigente cayó ante Carlos Menem, quien luego sería electo como sucesor de Raúl Alfonsín.
Precisamente durante el gobierno radical, Cafiero tuvo un gesto histórico: cuando en la Semana Santa de 1987 se produjo el levantamiento carapintada, el dirigente justicialista se asomó al balcón de la Casa Rosada junto a Alfonsín para darle su respaldo ante la amenaza de un nuevo golpe militar.
En 1991 fue designado embajador en Chile, puesto que ocupó hasta 1993, cuando fue electo senador nacional. Desde ese año ocupó su banca de manera ininterrumpida hasta 2001, cuando aceptó el puesto de jefe de Gabinete durante la brevísima presidencia de Eduardo Camaño. Apenas días después, en enero de 2002, volvió a su puesto de senador, cargo que ocupó hasta fines de 2005.
En su autobiografía La militancia sin tiempo, Cafiero recordó su participación como un ciudadano más en el histórico 17 de octubre de 1945, cuando miles de personas marcharon para pedir por la liberación de Perón, funcionario del gobierno militar de Edelmiro Farrell.
Apenas tres años después, a los 26 años, formó parte del primer gobierno peronista como consejero financiero en la Embajada Argentina en Washington, Estados Unidos. Luego ocupó un puesto en la Cancillería y, finalmente, entre 1952 y 1955, fue nombrado Ministro de Comercio Exterior de la Nación.
Fuentes: Télam e Infobae