En el día de hoy se registraron multitudinarias marchas en Cisjordania pidiendo el reconocimiento de Palestina como un estado por parte de la Organización de la Naciones Unidas. En Nueva York, en la apertura de la Asamblea General del organismo internacional, la presidenta de Brasil se expresó a favor del reclamo.
Decenas de miles de palestinos tomaron hoy pacíficamente las calles de ciudades de Cisjordania, ondearon banderas y entonaron cánticos en una jornada
de manifestaciones para respaldar el pedido de su presidente para que la ONU reconozca a Palestina como Estado de pleno derecho.
Las marchas fueron cuidadosamente organizadas por el gobierno autónomo del presidente Mahmud Abbas, que dio el día a los empleados públicos y a los estudiantes y puso a disposición decenas de micros para que la gente se trasladara a los lugares de movilización.
Asimismo, casi todas las manifestaciones se realizaron lejos de sitios sensibles para evitar tensiones con los colonos judíos cisjordanos y con los más de 1.500 soldados que Israel desplegó la semana pasada en los territorios ocupados en previsión de disturbios durante las marchas.
La excepción fue la manifestación en Hebrón, donde varios cientos de judíos ultraortodoxos viven en un enclave fortificado en el centro de la antigua ciudad bíblica.
En el único y breve episodio de violencia de la jornada, varias decenas de chicos palestinos de Hebrón tiraron piedras contra los soldados, que respondieron con gas lacrimógeno, en un incidente que no dejó heridos.
Abbas tiene previsto solicitar esta semana al Consejo de Seguridad de la ONU que reconozca a un Estado de Palestina que incluya Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén este, territorios capturados por Israel en una guerra contra una
coalición de países árabes en 1967.
Abbas, quien está en Nueva York desde el lunes pasado, había pedido marchas pacíficas de apoyo a su iniciativa, que tiene previsto presentar formalmente luego de dar su discurso ante la Asamblea General de la ONU, el próximo viernes.
En la ciudad de Ramallah, sede del gobierno palestino de Abbas, miles de jóvenes agitaron banderas palestinas en una plaza céntrica y entonaron cánticos a favor del establecimiento de un Estado, la aspiración histórica de los palestinos.
En la norteña ciudad de Naplusa, decenas de miles de palestinos salieron a las calles para apoyar los planes de Abbas.
Junto a una pequeña secta de judíos ultraortodoxos que se opone a la existencia de Israel, los activistas rezaron en la cercana tumba de José -sagrada para judíos y musulmanes y el lugar donde la tradición sitúa la sepultura del patriarca bíblico- e izaron una gran bandera palestina, informó la cadena CNN.
Israel y Estados Unidos se oponen a los planes de Abbas por considerar que cualquier Estado palestino, para ser viable, debe ser resultado de negociaciones y de un tratado de paz entre las partes en conflicto, y Washington ya anticipó que vetará la medida en el Consejo de Seguridad de ser necesario.
Ante este esperado rechazo, los palestinos podrían recurrir a la Asamblea General de la ONU, donde no hay derecho a veto y donde se estima que lograrán fácilmente el respaldo de una amplia mayoría de los países, entre ellos Argentina, a que se eleve su estatus actual de "entidad observadora" a "Estado observador no miembro".
Luego de dos décadas de infructuosas conversaciones de paz -actualmente estancadas desde hace un año- los palestinos creen que un fuerte respaldo internacional les permitirá negociar más de igual a igual con Israel en futuras conversaciones.
Abbas dice que negociar con Israel sigue siendo su preferencia, pero que sólo reanudará los contactos si el Estado judío acepta las fronteras anteriores a 1967 como punto de partida del proceso.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu -quien hasta hace dos años se oponía a la existencia de un Estado palestino-, dice que las conversaciones deberían iniciarse sin precondiciones, pese a que por su parte exige que los palestinos reconozcan el carácter judío del Estado de Israel.
"Fuimos a la ONU porque estamos cansados de negociaciones en nombre de las negociaciones", dijo Tayeb Rahim, un asesor de Abbas, en un discurso tras la marcha en Ramallah. Rahim agregó que Estados Unidos está siendo injusto con los palestinos al amenazas con su veto y al presionar a otros países a no respaldar la solicitud de Abbas.
En declaraciones a la cadena de televisión árabe Al Jazira, el veterano activista palestino Mustafá Barghuti también se manifestó sorprendido por la oposición del presidente estadounidense, Barack Obama, quien en 2010 manifestó en la ONU su esperanza de alcanzar un acuerdo este año para crear un Estado palestino.
"Considero muy extraño que Obama vaya a vetar la solicitud de un Estado palestino, cuando apoyó la idea hace un año ante la Asamblea General de Naciones Unidas", señaló Barghuti.
Además de la amenaza de veto de Obama, legisladores del Congreso estadounidense advirtieron que podrían cortar la asistencia financiera de cientos de millones de dólares a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de Abbas.
Israel también amenazó con "consecuencias graves" que, aunque no detalló, podrían incluir la anexión de colonias de Cisjordania, mayores restricciones a los movimientos de los palestinos en la región o suspender la transferencia de impuestos que cobra en nombre de la ANP.
Abbas no controla ni Jerusalén este, anexada por Israel en 1980, ni Gaza, donde gobierna el movimiento islamista palestino Hamas, que echó a las fuerzas de Abbas de la región en 2007 y que no apoya la iniciativa del presidente ante la ONU.
En Gaza no hubo manifestaciones ni a favor ni en contra de la medida en virtud de un acuerdo entre Hamas y el partido Al Fatah de Abbas para evitar caldear los ánimos y no perjudicar un acuerdo de reconciliación entre los dos partidos.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, defendió hoy ante la 66a. Asamblea
General de la ONU el reconocimiento del Estado palestino, criticó las intervenciones armadas a naciones árabes y aseguró que su país merece un lugar permanente en el Consejo de Seguridad del organismo.
Rousseff aseveró que "ha llegado el momento de tener a Palestina acá representada", y recordó que "Brasil ya reconoce el Estado palestino en las fronteras de 1967", antes de la Guerra de los Seis Días.
En tanto el secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, afirmó al abrir hoy la sesión de la Asamblea General que el punto de mira estará puesto en el pedido de la Autoridad Palestina de convertirse en un Estado miembro del organismo internacional.
Sobre el tema, Ban señaló que "los palestinos merecen un Estado, Israel necesita la seguridad y el punto muerto sobre la reactivación de las negociaciones debe ser roto".
En su alocución el secretario general comprometió a la ONU a realizar "incansables esfuerzos para ayudar a conseguir que la paz se alcance mediante una solución negociada".