En una visita a la provincia sumamente simbólica, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, participó del acto central en conmemoración de los 200 años del cruce de Los Andes en el Campo Histórico El Plumerillo, en Las Heras. El mandatario nacional, como lo hizo durante la campaña, habló de la unión del país y del “sueño” que podemos cumplir los argentinos si trabajamos “todos juntos, en equipo”. No hizo declaraciones ni anuncios políticos.

En compañía de la vicepresidenta Gabriela Michetti, de los gobernadores de Mendoza y de San Juan –Alfredo Cornejo y Sergio Uñac, respectivamente–, de la vicegobernadora de la provincia, Laura Montero, y del intendente de Las Heras, Daniel Orozco, Macri fue partícipe y protagonista del acto que conmemoró el bicentenario de la gesta libertadora del General José de San Martín. Además, estuvieron presentes embajadores y militares chilenos, el gabinete completo de Cornejo, los ministros nacionales de Defensa, Cultura y del Interior (Julio Martínez, Pablo Avelluto y Rogelio Frigerio, respectivamente) y funcionarios sanjuaninos.

El Presidente destacó los valores éticos sanmartinianos y los usó para intentar renovar su discurso, en el que volvió a convocar a los argentinos a trabajar unidos para lograr un país mejor. “Mi mayor sueño como presidente es ayudar a los argentinos a elegir en el camino de la búsqueda de la felicidad”, dijo el mandatario.

Aseguró, como en otras oportunidades, que Argentina va en camino a tener un rol más importante a nivel regional y también mundial, porque “es lo que corresponde y lo que nos merecemos”. También se autodestacó en su gestión porque imaginó al presidente que esté al mando del país dentro de cien años conmemorando el tricentenario de la gesta sanmartiniana, pero también que de entonces a un siglo atrás “la Argentina emprendió un cambio” para potenciar y acelerar el crecimiento del país.

Uñac, Cornejo y Macri en el acto que se realizó en El Plumerillo.

El discurso de Cornejo

El gobernador de Mendoza, que habló antes que el presidente en el acto, se refirió a su par sanjuanino, Sergio Uñac, como “amigo”, quien a su vez le devolvió la gentileza llamándolo “amigo y colega”, a pesar de las disputas que hubo entre ambas provincias respecto de dónde serían los festejos del bicentenario del cruce de Los Andes.

Cornejo, en sintonía con Macri, destacó del prócer los valores del trabajo en equipo y aseguró que “no hay libertad posible en la desunión entre los argentinos”. En todo el discurso interpeló a Macri, como convocándolo a hacer posible esa unión de la que ambos hablaron.

El Regimiento de Granaderos se lució en el desfile posterior. Foto: Axel Lloret.

El acto

Bastante puntual, Mauricio Macri llegó al Campo Histórico alrededor de las 19.15, entre aplausos y vítores de los vecinos que se habían acercado. Acompañado de Michetti, Cornejo, Uñac y Orozco, pasearon por las barracas del lugar, donde había un importante despliegue para recrear una jornada típica de 1817, en la que participaron unos treinta actores.

Posteriormente, la banda Talcahuano interpretó los himnos de Argentina, Chile y Perú y el Himno al General San Martín. Acto seguido, el presidente y los dos gobernadores hicieron una ofrenda de laureles. Luego, once jinetes se acercaron a las autoridades para solicitar a Macri la autorización antes de cruzar Los Andes junto a otras 160 personas, aproximadamente. Este cruce, aunque sin la presencia del presidente, se realiza cada año.

Los actos por los 200 años de la gesta libertadora finalizarán el 12 de febrero, día en que se conmemora la victoria de San Martín en la Batalla de Chacabuco. Ese día, domingo esta vez, Macri y la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, recibirán a las columnas de militares argentinos y chilenos.

En total, se calcula que aproximadamente 400 personas asistieron al acto protocolar, además de militares y funcionarios.