El president cesado de la Generalitat, Carles Puigdemont, abandonó Cataluña y se encuentra en Bélgica, según adelantaron los diarios españoles La Sexta y El Periódico que, a su vez, citan fuentes del Gobierno español. Luego de las masivas manifestaciones del domingo 29, Puigdemont publicó en las redes sociales una fotografía del Palau de la Generalitat, que en un principio hizo pensar que se encontraba en el edificio, pero resultó ser antigua. Tampoco acudió a la reunión del PDeCAT que se había convocado para esta mañana a las 10.30 (hora local). La noticia trascendió después de que el fiscal del Estado pidiera que el propio Puigdemont y su Govern declaren de manera urgente por rebelión, sedición y malversación.

El president cesado viajó a este país solo un día después de que el secretario de Estado de Asilo y Migración belga, Theo Francken, provocase una polémica al abrir la puerta a la concesión de asilo a Puigdemont, oferta que fue poco después negada por el primer ministro, Charles Michel. El coordinador general del PP, Fernando Martínez Maíllo, aseguró que el viaje a Bruselas del expresidente de Cataluña es fruto de la "desesperación", puesto que este lunes no acudió a su despacho en la sede de la Generalitat, después de haber sido destituido el viernes por el Gobierno.

En rueda de prensa,  Maillo dijo que ve "una contradicción" en que Puigdemont se haya trasladado a la capital de las instituciones europeas "donde uno de los grandes valores es la defensa del Estado de Derecho, de la legalidad y de los valores constitucionales". Y añadió: "Para eso, que se quede en casa, es un desatino y una muestra de desesperación".

Marcha por la unidad

Cientos de miles de personas marcharon el domingo 29 en Barcelona en la manifestación convocada por Societat Civil Catalana, la principal organización ciudadana contra el independentismo. Con el lema "Todos somos Cataluña", cerca de 1,3 millones de ciudadanos circularon por la ciudad en un acontencimiento que contó con el apoyo del Gobierno y de políticos de los partidos constitucionalistas, según señaló el diario español El País en su edición digital. La expresión popular fue una llamada a participar en los comicios del 21 de diciembre, convocados por el presidente Mariano Rajoy. 

Durante la manifestación se escuchó el mismo lema que durante los días previos al referéndum del 1.º de octubre tomaron los independentistas: "Votaremos" se escuchó este domingo por las calles de la capital catalana, pero esta vez para invitar a la participación en las elecciones autonómicas anunciadas por el presidente Rajoy. Miles de banderas de España, senyeras y, en menor medida, de la Unión Europea aparecieron el centro de la capital. En la cabecera de la manifestación, tras la pancarta con el lema "¡Todos somos Cataluña!", se ubicó una amplia representación de las fuerzas constitucionalistas. 

En la masiva convocatoria se escucharon frases como "Puigdemont, a prisión", "155. Se acabó la fiesta", "Más puentes y menos muros", "El 38 % no es Cataluña" y "El despertar de un pueblo dormido", junto a otros varios carteles presentes en la concentración, advierte el diario español. 

De acuerdo con lo que señala la crónica, varios participantes mostraron hartazgo y desazón, hecho que se notó en los discursos que se escucharon en el escenario, ubicado en el paseo de Gracia con Gran Via de les Corts Catalanes. "¿Cómo pretenden que se les reconozca legitimidad cuando todo esto lo han construido con mentiras?", se preguntó desde el estrado la catedrática de Derecho Constitucional Teresa Freixas, que se despidió con vivas a España, Cataluña, Europa y al Rey: "Estamos aquí en defensa de la libertad, el Estado de derecho y la democracia. ¿No querían votar? Pues hacedlo".

Al término de la manifestación hubo varios incidentes en distintos puntos de la ciudad con personas que están a favor de la independencia. Un grupo de varias decenas de personas rodeó la zona vallada reservada a la prensa y golpearon a dos periodistas de TV3: "Fuera", "Manipulación", "Asquerosos", "Fascistas", gritaban los manifestantes a un grupo de fotógrafos. Además, un taxista resultó herido de un corte después de que un objeto rompiera la ventanilla de su auto.