Paola Gonzalez es familiar de una de las personas sobrevivientes del Próvolo de Mendoza, donde se cometieron abusos sexuales por parte de los religiosos a cargo del exinstituto. El sábado 4 de abril tomó una gran decisión y abrió un merendero para colaborar con sus vecinos del barrio San Martín.

Ante a la crisis por la pandemia y con la solidaridad que la caracteriza, Paola decidió ayudar a cubrir las adversidades de las familias de su barrio. Todos los años realiza el festejo del día del niño, pero esta vez su empatía fue más allá y abrió un merendero.

“Todo comenzó cuando se declaró la cuarentena obligatoria. Me surgió la idea de hacer un merendero y me contacté con amigos periodistas y abogados, ellos empezaron a darme una mano con todo. Entendemos que en esta situación no todos los padres están trabajando y se les dificulta llevar un plato de comida a sus mesas”, contó Paola a Unidiversidad.

En su casa, todos los días Paola recibe a aproximadamente 78 personas del barrio San Martín que acuden con una jarra para buscar leche y con una bolsita para llevarse tortitas, rosquitas o sopaipillas. El lugar cubre desayuno y merienda con un refuerzo, que suele ser un postre sólido como arroz con leche, flan o budín de pan. “Siempre dejamos la ventana de la cocina abierta, para que la gente vea cómo trabajamos”, comentó.

Cómo ayudar

Paola recibe la ayuda y colaboración de sus hijos, vecinos y amigos. Es por esto que inició una campaña para que, el que lo desee pueda donar alimentos como harina, té, grasa, leche, cacao, azúcar, levadura, huevos o aceite.

“Las donaciones las pueden traer a mi casa en el Barrio San Martín, manzana N, casa 14 o coordinar conmigo al 2616714277 y encontrarnos en la rotonda del Hospital Lagomaggiore”, explicó Paola. Desde la organización por los derechos humanos Xumek, habilitaron un formulario, donde se ofrecen combos solidarios para que las personas donen a través de su tarjeta de crédito o débito.