Luego del fracaso de la reunión pactada en el ministerio de Trabajo, realizada por el secretario Lucas Aparicio con los gremios aeronáuticos. La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA) anunció un paro de 48 horas para todo el país que empezará este jueves a las 6 de la mañana.

El paro afectará a las compañías aéreas que vuelan cabotaje en el país con pilotos argentinos, Aerolíneas Argentinas, Austral, Avianca, Latam y Andes, no así a Flybondi y Norwegian, ya que estas empresas no cuentan con personal afiliado a ninguno de los sindicatos que lo decretaron.

La medida reviste en reclamo a una resolución de la ANAC que permite a las compañías aéreas que operan en la Argentina contratar pilotos extranjeros, y la nueva medida de fuerza llega luego de que se terminara el proceso de conciliación obligatoria dictado el 12 de diciembre por la Secretaría de Trabajo.

La disposición de APLA, que dirige Pablo Biró, también será acatada por el sindicato UALA, el otro gremio de pilotos, que tutela Rubén Fernández. Los otros gremios del sector aeronáutico suelen moverse en bloque, con lo cual también podría haber medidas en conjunto.

Siempre según el comunicado de APLA, "tras un mes de negociaciones en el marco de la Conciliación Obligatoria, el titular de la ANAC, Tomás Insausti, optó por mantener la vigencia de la Resolución 895/18 que modificó la reválida de licencias extranjeras de pilotos".

A las cero horas de este miércoles venció la conciliación obligatoria que regía desde el 11 de diciembre por la modificación que impulsa la ANAC y que, según este organismo "solamente busca agilizar los trámites para incorporar pilotos extranjeros".

Los gremios argumentaron entonces que esta resolución es “una puerta que se abre para avanzar con el contrato de pilotos extranjeros fuera de convenio para poder romper huelgas” y frente a esta situación dispusieron un paro por 48 horas para los días 13 y 14 de diciembre último, pero Trabajo dictó la conciliación obligatoria por 15 días hábiles.

Para los sindicatos, las nuevas regulaciones benefician a la "extranjerización de la mano de obra", lo que ocasionará que "muchos pilotos argentinos pierdan sus empleos".