Los dirigentes del sector buscan posicionarse tras el 51% de la expropiación de las acciones de la empresa. Nuevo estatuto y construcción de poder.
Jorge Córdova (Supeh) y Dante González (petroleros privados) se posicionan para un puesto en YPF. Foto web.
El proyecto de ley para expropiar del 51% de las acciones que Repsol tiene de YPF, incluye que los trabajadores tengan representación en el directorio. En total serían 9 miembros, del total de 17 que tiene la gerencia, que se repartirían con 5 para el gobierno nacional, 3 para las provincias de la
Ofephi (Organización Federal de los Estados Productores de Hidrocarburos) y 1 para los obreros.
Mendoza quiere dar pelea por ese puesto y esto ya genera ruido y resistencia en el ámbito sindical. Es que por un lado están los trabajadores encuadrados en el Sindicato Unido Petroleros e Hidrocarburos (Supeh) ex SUPE que pretenden que ese puesto lo ocupen un dirigente del gremio, porque son ellos quienes representan a los trabajadores petroleros estatales. Allí está Jorge Córdova de la CGT disidente y del Peronismo Federal.
En la otra vereda, están los trabajadores que quedaron en la empresa privatizada en los `90 y que están representados por el Sindicato de Gas y Petróleo Privado, cuyo referente es el legislador del Frente para la Victoria, Dante González.
La cabeza de este armado, es el titular del Sindicato Único Petroleros e Hidrocarburos (Supeh), Antonio Cassia. El gremialista mendocino tendrá un rol fundamental en la normalización de la compañía, ya que será el nexo entre los trabajadores de YPF y el interventor y ministro de Planificación, Julio De Vido.
Cassia, un hombre que, al igual que González, tiene llegada a Casa Rosada, pretende que el representante obrero sea un sindicalista de ese gremio, en este caso Córdova, por “encuadramiento gremial”.
“Todavía no hay nada. Primero hay que esperar que salga la ley, una vez que salga se va a conformar el directorio. Todo lo que se dicen son trascendidos. Para mí sería un orgullo, un honor ocupar el directorio. Hay otros que seguramente tendrán las mismas pretensiones y es lógico. Lo importante es que los trabajadores tengamos una presencia en el directorio y eso es importante”, explicó González.
El cargo de director obrero tiene un valor desde lo simbólico y de construcción de poder, de ahí la disputa. En el Supeh dicen que el ministro de Planificación, Julio De Vido, aseguró a Cassia, cuando se reunieron hace algunos días, que el miembro obrero será para esa agrupación gremial y el dirigente piensa que el cargo debe ser ocupado por un hombre del interior del país.
“Nosotros representamos entre 6 mil a 7 mil trabajadores de YPF en Mendoza con convenios colectivo. Tenemos que esperar hasta que se apruebe la ley para analizar lo del director obrero. Lo importante es que se van a respetar las fuentes de trabajo”, indicó Córdova.
Desde el sindicato de petroleros privados indicaron que en la provincia representan a 4 mil trabajadores. “Para mí sería un honor ocupar ese cargo no solo como trabajador sino como mendocino, sería un gustazo”, expresó González.
Si González lograra un lugar en el directorio, su espacio como legislador lo ocuparía el ex decano de la Facultad Ciencias Políticas y Sociales de la UNCuyo, Juan Carlos Aguiló. “El que sigue es él en la nómina, pero no sé si es incompatible o no un cargo con el otro. No he visto el estatuto”, explicó el dirigente gremial.
Consultado por este medio, Aguiló señaló que “son todas especulaciones” y todavía no se pueden adelantar opiniones hasta que González no tenga un ofrecimiento oficial. “Me parece que habría que esperar un poco por una cuestión estatutaria. Absolutamente estoy con ganas de asumir pero son supuestos y no me quiero hacer ninguna película todavía”.