Tal cual lo adelantado la semana pasada por el propio ministro de Trabajo, Jorge Triaca, el Gobierno comenzó a enviar al Parlamento la reforma laboral que pretendía llevar adelante el año pasado después de haber ganado las elecciones, pero de manera fraccionada, ante las resistencias expresadas por los gremios.

Luego de que inicialmente la CGT expresara su beneplácito hacia el proyecto oficial, el camionero Pablo Moyano hizo volar por los aires cualquier posibilidad de que el proyecto avanzara al sugerir la reaparición de “la Banelco”. Así las cosas, el Gobierno postergó primero el envío del proyecto al Senado, y luego lo archivó, aclarando que lo mandaría por etapas, cosa que confirmó el presidente Mauricio Macri en la Asamblea Legislativa del 1° de marzo.

Ahora los primeros capítulos de la reforma laboral llegaron al Parlamento. Entraron por el Senado el viernes por la noche y están referidos al blanqueo laboral, pasantías y una agencia de tecnología médica.

En el primer caso, el ministro Jorge Triaca había adelantado la semana pasada que la idea es “someter a debate capítulo por capítulo para poder avanzar con los temas. Vamos a comenzar con el blanqueo porque es prioritario y es uno de los que tiene más consenso”. Triaca agregó que “nuestro foco está en la formalización laboral, que hoy es el principal problema de la economía argentina”, y reconoció que “en el país hay 4,5 millones de trabajadores informales”.

Próximo tema: blanqueo laboral

El Ejecutivo enviará al Congreso el proyecto de reforma laboral. Dividido en cuatro capítulos, el primero en tratarse será el que apunta a eliminar el empleo no registrado.

El proyecto perdonará a los empleadores en los impuestos previsionales impagos, con la condición de que se declare el vínculo laboral. En tanto, respecto a los años trabajados en negro, se propondrá que se le reconozca al trabajar cinco años de aporte hacia atrás.

Otro punto importante es el que establece la renuncia del empleado a reclamar en un futuro por la vía judicial. “El trabajador puede negarse a entrar al blanqueo y si quiere, puede hacer juicio por los aportes no realizados. Pero si acepta ser formalizado, renuncia al derecho a reclamar judicialmente por los años sin aportes”, explicó el titular de la cartera de Trabajo.

Los otros proyectos que ingresaron al Senado, también fragmentos de la propuesta original del Gobierno, corresponden a la creación del Instituto de Formación Profesional, que no solo consistiría en habilitar las pasantías como modalidad de capacitación y no como un vínculo laboral, sino que apuntaría a reconvertir oficios que están desapareciendo.

También propone el Gobierno la creación de la Agencia Nacional de de Evaluación de Tecnologías de Salud.

En el paquete de normas impulsadas por el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, no figuran los capítulos más irritantes para los sindicalistas, inherentes al tema de las indemnizaciones, la creación de un fondo de desempleo y la rebaja de aportes patronales, ya incluida en la reforma tributaria recientemente sancionada.