Mendoza recibió a Salta en el marco de la última fecha del torneo Argentino de Uniones. Las Llamas necesitaban vencer a su rival -era escolta del torneo- y esperar una victoria de Córdoba sobre Buenos Aires. Las Llamas hicieron su parte del trabajo, vencieron a Salta 37-29 pero no pudieron gritar campeón ya que Buenos Aires venció a Córdoba en un apretado 9-5. 

El equipo de García Danza, Biffi y Sánchez, estuvo realmente cerca de la hazaña. Los cuyanos obtuvieron victorias ante Tucumán, Rosario -ambas de visitante- y Salta, empataron ante Buenos Aires y perdieron en Córdoba frente los Dogos. Con un equipo muy joven, pero con buenos valores y con la experiencia de jugadores de trayectoria, como Ogando, el capitán De Paolis o Caram, Mendoza fue protagonista del torneo de principio a fin.  Con un andar sólido y con puntos altos dentro del desarrollo de una idea de juego, el equipo del tridente se basó en el juego de manos para ser ofensivo, además de un gran pie derecho de Tomás Videla. El jugador de Liceo fue fundamental a la hora de sumar en momentos claves. 

Los cuyanos supieron sobreponerse a bajas importantes, como las de Rodrigo Báez o Juan Pablo Orlandi, quienes no pudieron aportar lo suyo dentro del equipo, sin embargo, sus compañeros respondieron, y con creces. 

Mendoza terminó segundo, a punto de repetir el título -único de su historia-,  pero con la tranquilidad de haber encontrado a jugadores capaces de ponerse una camiseta que siempre obliga a realizar buenas campañas.