Liga 8 de hockey sobre césped, un espacio que alimenta el deporte y la inclusión trans en Mendoza
La iniciativa que cumple 10 años de vida tiene como objetivos fomentar fines sociales, eliminar la discriminación por identidad de género y ayudar económicamente a deportistas que necesiten un trabajo.
Foto: Unidiversidad.
Para muchas personas hacer deporte es un estilo de vida, por varias razones ligadas a la salud corporal y mental. Es que realizar ejercicio diario desencadena beneficios inmediatos, como por ejemplo controla el peso, combate enfermedades, mejora el estado de ánimo, aumenta la energía y promueve un mejor sueño. Si a todo eso le sumamos que la práctica de deporte tiene fines sociales, promueve la inclusión de personas trans y ayuda económicamente a quienes lo practican, podríamos decir que se trata de una actividad completa. Ese es el caso de la Liga 8 de hockey sobre césped de Mendoza, un espacio deportivo que conjuga todos estos aspectos y que cumple 10 años de vida en la provincia.
Sonia Ruocco, creadora de la Liga 8, dialogó con Unidiversidad para contar de qué se trata esta iniciativa que le da espacio a todas las personas que quieren practicar hockey y que tiene como objetivo superar la discriminación por identidad de género. Además permite a los y las deportistas costearse sus gastos y encontrar un sustento económico.
Asimismo, este proyecto deportivo y social ha logrado un reconocimiento sudamericano y crece a diario, por lo que el objetivo de fondo es seguir creciendo e implementar distintas mejoras que potencien la vida de las personas.
“La Liga nace por una necesidad que, evidentemente, estaba latente. Me di cuenta cuando me convertí en exjugadora y vi la situación de muchas mamis y jugadoras retiradas que no estaban nucleadas en ninguna asociación. Estas personas no tenían acceso a un club y, por ende, quedaban impedidas de poder realizar deporte. A partir de esa situación, varios técnicos y personas retiradas de polideportivos se interesaron en armar una propuesta y allí comenzó la Liga 8”, explicó Sonia Ruocco sobre el comienzo de esta iniciativa deportiva y social.
Sonia Ruocco, exjugadora de hockey sobre césped y creadora de la Liga 8 de Mendoza. Foto: Unidiversidad.
En paralelo, Sonia puntualizó que más allá de crear un espacio recreativo, la idea siempre fue que existiera un lugar de buena competencia, ya que es lo que “alimenta el espíritu de los deportes en conjunto”, y que eso, a su vez, potencie el futuro de las deportistas y aliente a las personas a sumarse.
En cuanto a la particularidad del número de integrantes de los planteles deportivos, Ruocco detalló: “¿Por qué nace esta Liga 8? Porque las dimensiones de la cancha que me proveyó la Municipalidad (de Godoy Cruz), de la cual estoy muy orgullosa, no tiene las dimensiones de una cancha de 11, por lo que se me ocurrió darle un toque distintivo y salir del famoso formato ‘seven’".
Foto: Unidiversidad
Por otra parte, la creadora de la Liga 8 señaló que tanto la edad de los y las deportistas, como su condición socioeconómica, no son impedimentos para la práctica deportiva. Más bien todo lo contrario, ya que este es un espacio que busca promover la inclusión y eliminar cualquier diferencia.
Esos aspectos provocaron que esta competencia alcanzara números impensados desde su creación: “El comienzo de esta liga contó con la participación de 26 equipos, mientras que el año pasado el Torneo Clausura finalizó con 145 combinados provinciales y 9 categorías en lo que respecta a mayores, 6 más en el espacio juvenil y 2 en varones”.
Ese crecimiento constante hizo que la Liga 8 se expandiera hacia diferentes provincias y, por ende, se organizaran torneos interprovinciales, donde se generan lazos sociales que duran toda la vida: “La competencia ha tomado formas increíbles por su evolución en el tiempo. En la actualidad, participan equipos de San Luis, Córdoba y de lugares alejados de Mendoza —como el Sur o el Este—, lo que ha provocado una federalización importante, que está en pleno crecimiento”.
Por ello, Ruocco explicó que han intentado lograr que haya una “segmentación en los niveles deportivos”, debido a que participan “exjugadoras de Las Leonas y también personas que por primera vez agarran un palo de hockey”. Esa situación ha llevado, por ejemplo, a que “madres e hijas compartan una cancha o chicas federadas y no federadas”. Es por ello, que ahora hay dos ligas, la Master y la liga de Honor”, según el nivel de los y las participantes.
Foto: Unidiversidad
Otro de los puntos interesantes que tiene esta Liga es que a los equipos ganadores se les otorga un premio en efectivo para que puedan disfrutar en grupo y que permite, a su vez, ayudar a las personas que más dificultades económicas tienen.
En cuanto a las particularidades del reglamento, “esta Liga 8 implementó que no esté permitido el ‘golpeo’ de la bocha”, por las dimensiones de la cancha y para darle un toque distintivo, “regla que ha sido tomada por la Federación de Luján y por otras federaciones de distintas provincias, lo que es otro motivo de orgullo para este espacio deportivo que crece a diario”.
En cuanto a los horarios y la cantidad de partidos que se disputan, Sonia remarcó que la mayoría de los encuentros se juegan de lunes a viernes de 19:30 a 23 para no entorpecer las actividades laborales de las personas, como así también los días sábados. Aproximadamente se juegan 50 partidos semanales.
“Las inscripciones tienen un valor módico y se realizan distintas actividades, como sorteos, para que los equipos no tengan impedimentos para poder competir”, puntualizó la creadora de la Liga 8.
Foto: Unidiversidad
Finalmente, Sonia Ruocco hizo hincapié que la creación del Microestadio ubicado enfrente de Ecogas no solo sirve para que las personas realicen deporte, sino que también ha sido una fuente laboral para cientos de personas que hoy viven de esta actividad: “Además, existe un plantel de ‘mesas fijas’ (planilleras y demás espacios organizativos) que son integradas por chicas que necesitan un trabajo. Esta situación ha generado un espacio laboral muy importante porque incluye a árbitros, una comisión, mesa de control de los partidos, personas que cuidan la playa de estacionamiento. Es decir que el Microestadio se mantiene gracias a la Liga 8”.
En ese contexto, también se creó una escuela de árbitros propia de la fundación, que “es la única que hay en Mendoza y está a cargo del árbitro nacional Nicolás Roco”.
Próximamente, se construirá una cancha de futsal detrás del microestadio para acrecentar el deporte inclusivo en Mendoza. Asimismo, otras de las acciones positivas que se han logrado es el cambio de luminaria en el Microestadio.
Este año la Liga 8 cumple una década de vida y, como ha ocurrido desde aquel comienzo, cualquier equipo puede anotarse “siempre y cuando se respeten las normas de convivencia, de respeto, que exige siempre el espíritu del deporte”.
Foto: Unidiversidad
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