Durante la tarde de este jueves 24 de noviembre fue liberado el marido de Milagro Sala, Raúl Noro, y otros dos dirigentes de la Tupac Amaru, Iván Altamirano y Miguel Ángel Sibila, por el Juzgado de Control N.º 3 de la provincia de Jujuy. 

Noro (72) se encontraba detenido con prisión domiciliaria desde julio, acusado por el desvío de fondos públicos y asociación ilícita. Altamirano estaba preso en la Brigada de Investigaciones durante meses, mientras que Sibila se encontraba en una pequeña celda de una comisaría jujeña. Según denunciaron los organismos de derechos humanos ante la ONU, ambos estaban detenidos de forma “irregular”. 

De acuerdo a lo que publicó el diario Página/12, con estas tres nuevas excarcelaciones ya son cinco los dirigentes de la Tupac Amaru liberados luego de que el Comité de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de las Naciones Unidas advirtiera sobre las irregularidades de los procesos judiciales llevados a cabo contra los militantes y ordenara la liberación inmediata de Milagro Sala.

La líder de la Tupac continúa detenida desde enero junto a otros siete dirigentes de la misma agrupación. Recientemente, el Juzgado Contravencional N.º 1 de Jujuy suspendió por falta de pruebas el inicio del juicio oral contra Sala por el acampe en la Plaza Belgrano, motivo por el que fue encarcelada a principios de este año.

Esta semana la dirigente social recibió la visita de la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y otros referentes kirchneristas, quienes reiteraron el pedido por su liberación inmediata.  
 

La respuesta del Gobierno por la liberación de Sala

Luego del pedido de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA y el Grupo de Trabajo de la ONU para saber detalles sobre la detención de Milagro Sala en Jujuy, el Gobierno nacional respondió que la dirigente permanecerá denetenida porque liberarla implicaría "un claro peligro para con los objetivos de la investigación" judicial que se le sigue por malversación de fondos y fraude en la cooperativa que tenía a cargo durante el kirchnerismo.

"Arribar a la conclusión de que la detención de Sala resulta arbitraria, dando la espalda a esta evidencia aportada en los expedientes judiciales, resulta por sí misma una decisión arbitraria", fundamentó el texto elaborado por Cancillería en su respuesta sobre la situación de la líder de la Tupac Amaru. En una nota publicada por el diario La Nación, establece que el documento que entregó el Ejecutivo argumentó además que "la evidencia referida a las relaciones de dominio e influencia que conserva sobre testigos de la causa determina que su libertad [por Sala] en pleno proceso implicaría un claro peligro para con los objetivos de la investigación".