Los encuentros tuvieron lugar el 5 y 6 de diciembre en Washington, según un artículo publicado ayer por el portal de noticias Político. En esas reuniones, una docena de legisladores, entre los cuales se encontraría un senador republicano, plantearon sus preocupaciones al profesor de psiquiatría de la Universidad de Yale, Bandy X. Lee. La elección de Lee no fue en ningún caso casual puesto que entre sus trabajos destaca el haber editado la publicación "The Dangerous Case of Donald Trump" ("El Peligroso Caso de Donald Trump"), una colección de testimonios en la que una veintena de expertos en psiquiatría abordaban la salud mental del cuestionado mandatario.

De acuerdo con Lee, la necesidad de Trump de expresarse constantemente, y sin filtro, a través de su cuenta de Twitter "es una indicación de que se está viniendo abajo debido al estrés". "Trump va a ponerse peor y se volverá incontenible debido a la presión de la presidencia", advirtió Lee al portal de noticias Político.

El debate sobre la capacidad de Trump para ejercer el cargo cobró una cierta relevancia en las últimas semanas, especialmente por su trato hacía el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, en un momento en que Pyongyang está apostando fuerte por el desarrollo de armamento nuclear, reseñó la agencia de noticias EFE y luego replicó la agencia argentina Télam. Lejos de intentar calmar la situación, Trump no dudó en insultar a Kim Jong-un llamándole "hombre cohete", así como "bajito y gordo". 

Esta semana, el magnate incluso se jactó en las redes sociales de que él también tiene acceso a un "botón nuclear", como Kim había anunciado en su mensaje de Fin de Año, pero que el suyo es "mucho más grande y más poderoso". La preocupación trascendió a tal punto que la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, se vio forzada a no responder la incómoda inquietud de un periodista que le preguntó si este tipo de mensajes no podían ser sintomáticos de un posible desequilibrio mental del presidente.