"No os quedéis callados, porque si lo hacéis, les estáis dejando ganar a ellos". Son las primeras palabras de la víctima de La Manada, la joven violada por cinco hombres durante las fiestas de San Fermín de 2016. Manteniendo su nombre en reserva, la mujer envió una carta a El programa de Ana Rosa, un envío televisivo del canal Telecinco, con la que rompe su silencio. Se trata de un texto en el que básicamente da las gracias por el apoyo recibido y anima a denunciar casos similares. En ningún momento se refiere a los cinco sevillanos a los que denunció.

"Denunciad. Nadie tiene que pasar por esto. Nadie tiene que lamentarse de beber, de hablar con gente de fiesta, de ir sola a casa o de llevar una minifalda. Nos tenemos que lamentar todos de la mentalidad que tiene esta sociedad, donde esto le puede pasar a cualquiera, os lo aseguro", dice la joven madrileña, de 20 años en la actualidad. "Os puedo asegurar que todo el camino que hay que recorrer no es plato de buen gusto, pero ¿qué hubiera pasado si yo no hubiese denunciado? Pensadlo", se pregunta. "Para todas las mujeres, hombres, niñas, niños que estáis pasando por algo parecido: se puede salir. Pensaréis que no tenéis fuerzas para luchar, pero os sorprendería saber la fuerza que tenemos los seres humanos. Contadlo a un amigo, a un familiar, a la policía, en un tuit, hacedlo como queráis, pero contadlo. No os quedéis callados, porque si lo hacéis, les estáis dejando ganar a ellos"

La joven ha querido en la carta dar también las gracias a su familia y a las personas que más cerca de ella han estado en estos momentos; en concreto, a una amiga en particular a la que, según se entiende de sus palabras, habría conocido tras denunciar a La Manada. "También quiero dar las gracias a todas las personas que me han ayudado en este camino. Ojalá nunca os hubiera conocido, pero la vida es así y te trae a las mejores personas en los peores momentos, y eso es por algo. Ojalá nunca te hubiera conocido, amiga, de verdad. Pero gracias a esto tengo una persona imprescindible en mi vida. Compañera de batalla, que sé que nunca voy a olvidar".

La mujer tiene unas palabras también para las personas que han salido a la calle multitudinariamente desde que el caso salió a la luz: "También quisiera agradecer a toda la gente que, sin conocerme, tomó España y me dio voz cuando muchos me la intentaron quitar. Gracias por no dejarme estar sola, por creerme, hermanas, gracias por todo. De corazón. Gracias a todo el mundo que haya hablado de mí un segundo para repudiar lo ocurrido".

#Cuéntalo: la campaña que lidera Argentina para denunciar abusos sexuales

La iniciativa que comenzó en España para repudiar la condena por un delito menor a cinco violadores de una joven sobrepasó los límites europeos y encontró tierra fértil en nuestro país. Se publicaron 341 200 tuits en apenas 24 horas.

Y se dirige además a los políticos, personalidades y asociaciones que la respaldaron: "A las asociaciones, personas de la calle como yo, personalidades políticas, famosos, periodistas que me hayan respetado y en general, a todo quien se haya preocupado por mí. Gracias por hacerme sentir otra vez parte de una sociedad en que parece que si te violan tienes que llevar el cartel de violada pegado en la frente. Gracias por luchar, gritar, llorar y apoyar esta causa".

La víctima de La Manada explica en la carta lo que le ha producido escuchar cómo hablaban de su caso en la calle. "Tened cuidado con lo que decís. No sabéis cuántas veces he oído hablar de la 'chica de los sanfermines' sin saber que estaba a su lado. No soy 'la chica de los sanfermines'. Soy la hija, nieta, amiga y a lo mejor ese 'de' sois uno de vosotros. Así que, por favor, pensadlo antes de hablar. Igual que estamos mentalizados y no bromeamos con enfermedades, no podemos bromear con una violación. Es indecente y está en nuestras manos cambiarlo".

El escrito de la víctima llega cinco días después de que la Audiencia de Navarra decidiera dejar en libertad provisional a los cinco miembros de La Manada: Alfonso Jesús Cabezuelo, José Á. Prenda, Ángel Boza, Antonio M. Guerrero y Jesús Escudero, mientras se resuelve el recurso a la sentencia que les condenó a 9 años de prisión por abuso sexual con prevalimiento. Los jóvenes, que ya se encuentran en Sevilla, han pasado casi dos años de prisión desde que fueran detenidos el 7 de julio de 2016 en Pamplona.

Ayer se supo que el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción N.º 1 de Pozoblanco (Córdoba), que investiga a cuatro de los cinco miembros de La Manada por los supuestos abusos sexuales cometidos sobre una joven de 21 años, dictó un auto en el que impone a los investigados la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de la denunciante y de comunicarse por cualquier medio con ella.

Un día antes, los integrantes de La Manada cumplieron por primera vez el trámite de comparecer en los juzgados de Sevilla, algo que se repetirá cada lunes, miércoles y viernes a partir de ahora y mientras el Tribunal Superior de Justicia de Navarra examina la sentencia por la que fueron condenados.