Así lo había solicitado el ministro de la Corte Suprema de Chile, Adalís Oyarzún, quien ordenó la detención preventiva de Romano tras haber analizado la información entregada por el ministerio del Interior sobre la petición de refugiado que hizo a Chile el destituido camarista, prófugo de la justicia argentina desde agosto.

Con la detención de Romano, se avanza en el pedido de extradición solicitado por la justicia argentina por considerarlo partícipe de 103 delitos de lesa humanidad, por no haber denunciado o investigado violaciones a los derechos humanos de las que tomó conocimiento como funcionario judicial durante la última dictadura militar.

Según informó el diario La Tercera, el ex camarista argentino será trasladado a la Corte de Apelaciones de Santiago para declarar ante Oyarzún.

NU Digital habló con Alfredo Guevara, abogado de Derechos Humanos querellante en los juicios de lesa humanidad que se llevaron adelante en Mendoza. “Romano tiene todos los derechos de defensa ante el tratado de extradición que existe entre la Argentina y Chile, entonces obviamente él va a esgrimir la defensa. Tengamos en cuenta que se trata de un magistrado que ha estado permanentemente en contacto con la magistratura chilena vinculada al pinochetismo, entonces es un hombre conocedor de los vericuetos legales y demás cuestiones que puede haber alrededor del tema. Recordemos que la Cámara Cesárea aplicó unas numerosas oportunidades el tratado de extradición entre Chile y Argentina, así que esperamos que Romano siga con esa estrategia de chicanear y utilizar todos los argumentos para dilatar la extradición. En definitiva, el resultado final tomando en cuenta que se trata de crímenes de lesa humanidad por los cuales está acusado, es que v a tener que ser remitido a la Argentina; salvo que Piñera tomara la decisión política de darle asilo”, explicaba el abogado.

¿Cómo sigue todo? Una vez detenido Otilio Romano hay una serie de trámites a seguir; en este momento Otilio Romano tiene una sola oportunidad de salirse con la suya: que el presidente de Chile, Sebastián Piñera, le de asilo político. ¿Es posible esto? “Dentro de lo que es el trámite de extradición, es la Corte Suprema de Chile el órgano de aplicación, no interviene Piñera en lo más mínimo. Ahora, en el pedido de asilo sí. Entonces, la Corte debe seguir adelante con los trámites que tienen que ver con la extradición que incluye la detención; pero si Piñera tomara la decisión política de darle asilo, la Corte Suprema Chilena no podría seguir el trámite de la extradición”, contestaba Guevara. Y agregaba “Nosotros entendemos que no se puede dar asilo a personas que están acusadas de delitos de lesa humanidad, pero hay también toda una interpretación ideológica por parte de las cúpulas latinoamericanas que estuvieron vinculadas a la guerra sucia, al terrorismo de Estado, a todo lo que fue la enseñanza de las escuelas de Las Américas. Estas tácticas que incluían la desaparición, la tortura, y demás crímenes que han sido considerados de lesa humanidad, son reivindicados por la derecha latinoamericana como parte de la lucha contra el comunismo internacional; entonces hay toda una cuestión ideológica que todavía, a pesar del tiempo trascurrido, pesa mucho en Chile”.

Una decisión que puede costarle muy caro al Presidente chileno. “Desde el punto de vista político me parece que Piñera no tiene ningún margen para darle asilo. Si bien es cierto que estas derechas latinoamericanas reivindican este oscuro pasado, lo cierto es que no hay condiciones sociales y políticas hoy para semejante planteo; está totalmente fuera de la historia. Además, en caso de que Piñera tomara la decisión de darle asilo a Romano se arriesga enormemente a tener problemas políticos no sólo con Argentina sino también con todo el bloque Latinoamericano que de alguna manera viene planteando una ruptura con estas políticas. Si bien Argentina es el país que más adelante está, ya en Brasil, Uruguay y en varis países de Latinoamérica se iniciaron (o iniciarán) procesos de memoria, verdad y justicia. Por otra parte, internamente en Chile, las sociedades no están hoy dispuestas a apoyar una defensa de estos genocidas, de estas personas vinculadas a crímenes de lesa humanidad. Entonces esto implica también un costo político interno”, reflexionaba Alfredo Guevara.

En su sentencia, el Jury de Enjuiciamiento dijo que "no le cabe a este cuerpo colegiado un mínimo atisbo de duda para decidir que el doctor Otilio Ireneo Roque Romano no merece continuar en el ejercicio de la magistratura por no tener las condiciones morales para ostentar tan alto honor”.

El Jurado lo acusó de haber “omitido” en forma “sistemática” denunciar e investigar secuestros, desapariciones, torturas, apremios ilegales y violaciones, de los que tenía conocimiento directo por las declaraciones y reclamos de las víctimas que recibió como fiscal desde 1975 “con la Triple A” y durante la última dictadura.