La marcha de la economía fue la principal preocupación de los personas que votaron en las elecciones de este martes en Estados Unidos, seguida por desigualdad racial y el brote nacional de coronavirus, según mostró un sondeo a boca de urna. Esta encuesta suele marcar el tono y dar contexto a los resultados electorales posteriores. Este año, el sondeo también incluyó llamadas telefónicas a muchos de los que votaron de manera anticipada, un número récord de votos que superó el 70 % de la participación total de 2016.

Nueve de cada diez votantes dijeron que confiaban en que no habría irregularidades en el recuento de los votos, pese a las sospechas de un presunto fraude que, sin pruebas, sembró el presidente y candidato a la reelección, Donald Trump, en los últimos días.

Jóvenes de Mendoza que residen en EE. UU. nos cuentan cómo se vive esta elección crucial

Este martes 3 de noviembre, millones de ciudadanos y ciudadanas estadounidenses decidirán quién será su presidente durante los próximos 4 años. Donald Trump, líder del Partido Republicano, compite contra Joe Biden, del Partido Demócrata, para continuar el mandato presidencial que inició en enero de 2017.

Elaborado por la consultora Edison Research para los principales medios de Estados Unidos, el sondeo mostró que una mayoría de los votantes, un 34 %, mencionó a la economía como el asunto que más influyó en su voto.

La economía, sobre todo una baja del desempleo y un alza sostenida de los mercados, fue durante mucho tiempo uno de los principales activos de Trump, pero Estados Unidos entró en recesión en febrero pasado, jaqueado por el freno de actividades por el coronavirus.

La recesión es la primera desde 2009 y puso fin al período de expansión económica más prolongado de la historia de Estados Unidos, 128 meses seguidos, aunque el país empieza a dar algunas señales, aún tenues, de recuperación. La desigualdad racial fue mencionada como la segunda cuestión entre las más decisivas a la hora de definir el voto, con el 21 %, luego de que la muerte de varios afroamericanos baleados por policías blancos desatara algunas de las mayores protestas raciales en décadas.

Con Estados Unidos como país más afectado por la pandemia y enfrentado a un terrible tercer pico de coronavirus, la crisis sanitaria por la COVID-19 se ubicó como la tercera mayor preocupación de los votantes, con el 18 %, según el sondeo a boca de urna. Más de la mitad de los votantes, sin embargo, consideró de mayor importancia contener el coronavirus que reconstruir la economía, más en línea con la idea del candidato presidencial demócrata, Joe Biden, que con el mandatario y aspirante a la reelección, Trump, informó la cadena CNN.

El electorado se dividió en cuanto a si consideran apropiadas las medidas del gobierno de Trump para frenar el virus, ya que alrededor del 50 % de los votantes dijo creer que eran las correctas, mientras que la otra mitad opinó lo contrario. Cerca de las dos terceras partes de los votantes dijeron que usar tapabocas en lugares públicos es un deber ciudadano en beneficio de la salud pública, mientras que tres de cada diez opinaron que se trata de una decisión que depende de cada persona. Solo uno de cada diez votantes dijo que su principal preocupación era la inseguridad y también solo una de cada diez dijo que lo más importante para él era el acceso a la salud, una demanda muy vinculada a los demócratas.

Entre los encuestados, el 38 % se identificaron como demócratas, mientras que el 35 % lo hicieron como republicanos, y el 28 %, como independientes. Además, el 55 % dijo tener diploma universitario, un dato que la mayoría de los analistas considera, también, más favorable a la oposición.

Asimismo, se registró una pequeña brecha de género –el 53 % mujeres y el 47 % hombres–, y una distribución bastante habitual en términos etarios: el 16 % de jóvenes hasta 29 años, el 23 % de personas de 30 a 44 años, el 38 % de 45 a 64 años, y el 23 % de mayores de 65 años. La distribución racial, en cambio, sí reveló un cambio: los latinos aparecieron como la primera minoría con el 13 %, detrás del 65 % de votantes blancos y por delante de los 12 % de afroestadounidenses y el 3 % de asiáticos.