Para la Dirección General de Escuelas (DGE), los datos dados a conocer por la Universidad de Belgrano respecto de la evolución en la matrícula de salitas de cuatro y cinco años en Mendoza, son falaces. De hecho, fue la propia directora de Nivel Inicial, Adriana Rubio, quien detalló con números de los últimos años, que en realidad las salas de cuatro y cinco años del sector privado, han mantenido su matrícula muy por debajo de las escuelas estatales.

En total, al DGE calcula que la provincia cuenta con 1268 salitas de cuatro años y casi la misma cantidad de cinco. En tanto que el porcentaje de cobertura en ambos servicios educativos, es del 98%. 

Así, según los registros del área educativa, en 2015 (cuando arrancó la obligatoriedad de iniciar la educación formal desde los cuatro años) 49 131 niños y niñas conformaron la matrícula en las salitas de cuatro y cinco años estatales. En tanto que a las de gestión privada asistieron 12 290 niños y niñas.

En 2016, detalla Rubio, el total de alumnos/as que asistieron a nivel inicial fue creció a 51 935 en las salitas estatales y bajó a 12 111 en los privados. Un año más tarde, según la DGE, continuó el incremento en la matrícula estatal: mientras que 51 935 niñas y niños fueron enviados a éstas salitas, en el sector privado hubo 12 038.

Vale decir que los datos dados a conocer por la universidad bonaerense indican que en el período que va de 2005 a 2016 el Nivel Inicial de la provincia en el sector privado incrementó su matrícula un 258,2 %, mientras que en los estatales el aumento fue de 74 %. Estas cifras ubicaron a Mendoza como el sitio del país donde el aumento de niños y niñas en el Nivel Inicial fue mayor. 

Durante este año lectivo que finaliza, 51 878 pequeños/as recibieron clases para comenzar su camino de aprendizaje en el mencionado nivel, en las escuelas estatales, mientras que a los jardincitos pagos concurrieron 12 822 niños y niñas.

Rubio destacó que la gran diferencia de datos respecto del informe brindado por la universidad bonaerense, tiene que ver con que allí se incluyeron los salitas de tres años.

“Inclusive las escuelas públicas están recibiendo a niños y niñas que cursaron en la salita de tres años en una institución privada”, dijo la funcionaria y adelantó que la oferta existente respecto de las salas de tres años estatales es la que brindan los SEOS (Servicios Educativos de Orientación Social) dependientes de municipios, entidades barriales y organizaciones sociales.

Estimulación temprana, la clave para el éxito académico

Desde el punto de vista de la psicopedagoga Mónica Coronado, la importancia de iniciar la educación formal durante los primeros años de vida, no es menor. Ocurre que puertas adentro del jardín, los pequeños/as no sólo se encuentran con nuevas posibilidades para aprender habilidades cognitivas y agilizan su habla y vocabulario. Logran de hecho, comprender límites, socializar con niños y niñas de su misma edad, incorporan hábitos, rutinas y límites.

“Comprenden, en principio, que ellos no son los únicos en el mundo y que éste no gira en torno de ellos, como puede pasar en los hogares donde hay muchos adultos. Por el contrario, al estar con otros chicos entienden que hay otras personas que también tienen necesidades”, destaca la especialista, cuya postura coincide en que los tres años es una buena edad para iniciar la enseñanza.

Justamente en esta etapa cuando la mayoría ha dejado los pañales y aprenden a comunicarse de manera más hábil. Pero además, agrega Coronado, “el jardín es un espacio ideal para que los pequeños/as desarrollen su empatía e incorporen herramientas para su educación futura”, continúa Coronado.

La especialista detalla que esta situación quedó plasmada en las últimas evaluaciones del Operativo Aprender, realizadas en todo el país por el Ministerio de Educación, para evaluar el nivel educativo logrado en materias fundamentales entre casi 40 mil estudiantes de sexto grado y de quinto y sexto año de la secundaria.

La mirada de especialistas

Marcela Mirchak, es una voz autorizada por su propia experiencia al momento de opinar sobre la situación del Nivel Inicial en Mendoza. Es docente de jardines infantiles desde hace más de 30 años, pero además es licenciada en Gestión Institucional y Curricular de la UNCUYO.

Explica que "cuando no referimos a nivel inicial estamos hablando de edades que van de 0 a cinco años, aunque antes de los tres años la escolarización no sea obligatoria. Hay una realidad social que obliga a los padres a dejar a los niños en una institución antes de esa edad", detalla la especialista. 

Desde su punto de vista dentro de la gestión estatal es necesario reforzar el aspecto de infraestructura y el mobiliario. Por otra parte, destaca, hay jardines que necesitan un espacio propio, donde se respete la cantidad de metros cuadrados por niño.

Los espacios compartidos en las escuelas primarias que cuentan con jardincitos, es un tema aparte, explica Mirchak. Esto es debido a que los alumnos más pequeños necesitan de un patio propio, adecuado a sus necesidades. El personal, por su parte, debe ser especializado en educación inicial. "Este aspecto es fundamental para lograr buenos resultados", aclara la profesional. 

Mendoza, con el mayor aumento en el país de niños en jardines pagos

Según un informe presentado por la Universidad de Belgrano, el nivel inicial privado incrementó su matrícula en todo el país un 67 % entre 2005 y 2016. En nuestra provincia el crecimiento fue de 258,5 % en el mismo período. El dato incluye a los ...