Durante la apertura del XII Congreso Nacional de Ciencia Política, que lleva por lema central "La política en balance. Debates y desafíos regionales", el vicerrector de la UNCUYO, Jorge Barón, manifestó la relevancia que adquiere la participación en la vida pública, tanto para él como para la gente de su generación, ya que crecieron en un ambiente en el cual la política era algo maldito y causal de desapariciones y de represión de las más severas, y en el que hubo una negación de la política en su sentido más amplio.

“La cosa pública pasaba por las manos de unos pocos, que eran los que decidían los destinos de la Argentina”, apuntó. Su relato continuó con el año 1983 en adelante, época en que se regresó a un régimen en el que cada uno de los ciudadanos podía expresarse, caracterizado con altas y bajas y con momentos de mayor y menor valorización de la política. En ese sentido, enfatizó que no puede concebirse una vida sin ideologías, aunque estas sean diversas, ya que justamente de la pluralidad nacen las diferentes ideologías, pero indicó que “la ausencia de ideología, de política y participación en la vida pública es la muerte de la sociedad, o la agonía”.

Barón hizo hincapié en la nueva etapa en la que avanzó la UNCUYO para implementar un sistema electoral con voto directo, ponderado y con la participación de todos los claustros. “Por primera vez los que teníamos alguna ambición de ocupar un cargo directivo tuvimos que salir a hacer campaña política, hablar con los grupos y votantes. Fue un aprendizaje, ya que no sólo había que tener ideologías y propuestas sino saber transmitirlas, comunicarlas, expresar lo que sentimos, lo que pensamos, y a su vez escuchar y recibir solitudes, críticas de distintas sectores. Esto nos lleva a la construcción colectiva, a insertarnos en una Universidad con una intensa actividad política". Por último abogó, para que esta actividad resulte productiva y que sea una etapa más en el camino que ha emprendido el país de revalorización de la política como tal, y en la que los especialistas puedan aportar al bienestar social.
 

Orgullo anfitrión  

Por su parte, la decana Claudia García celebró la posibilidad de abrir las puertas de la facultad de Ciencias Políticas y Sociales al XII Congreso Nacional de Ciencia Política. “Nos enorgullecemos de poder ofrecer un espacio de intercambio que sea rico y significativo para el presente y devenir que nos ocupa, esperando que el trabajo cristalice en nuevas formas de consenso y que la Facultad y la Universidad puedan ofrecer aportes a este campo del conocimiento”.  

En ese marco, vinculó a la dirigencia mendocina con la universidad pública. “Hoy podemos decir que tenemos un gobernador electo egresado de la UNCUYO, intendentes que acaban de ser electos y un candidato al Parlasur, egresados de la carrera de Ciencia Política y docentes de la Universidad. Nos enorgullece que la Provincia siga teniendo una dirigencia que surge del seno de la universidad y la escuela pública”, manifestó la Decana.

García explicó que el Congreso ocurre en un momento muy significativo de la democracia Argentina. Se refirió a este año electoral y a la reciente realización de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) como instancias que consolidan un proceso cada más participativo y plural dentro del sistema electoral.

Señaló que el tema del Congreso es sustantivo para estos tiempos porque “estamos en una época en la que la política ha vuelto por sus fueros, luego de la década mercantilista de los 90, y se ejerce de una manera activa dentro y fuera de los carriles institucionales y en la que hombres y mujeres han entendido que el poder está hecho de carne y hueso”. En esa línea destacó que la Facultad trabaja sobre este objeto tan complejo, en el ejercicio de poder y la dominación, tanto en la dimensión de la reflexión teórica como en la administración de la cosa pública. Instó para que se puedan articular los proyectos de innovación académica en el marco de trabajo propuesto y sumarse desde el compromiso y debate.

Por su parte, el ministro de Tierras, Ambiente y Recursos Naturales de la Provincia, Guillermo Elizalde, subrayó la necesidad de promover debates, discutir en serio con la profundidad y diversidad de miradas. “Cuando hay un vacío de la política, de la discusión y de debate, las decisiones se toman en otros lugares. Hoy celebramos esa posibilidad", dijo. Por último, apuntó a los desafíos que deben asumir aquellos politólogos que han abrazado a la política como una vocación frente a lo público.

El presidente de la Sociedad Argentina de Análisis Político (SAAP), Martín D'Alessandro, mencionó que estos Congresos aumentaron la cantidad de asistentes y panelistas, sumaron también presentaciones de libros y paneles de estudiantes, y mejoraron su calidad. En ese sentido, remarcó el optimismo que alimenta su realización, estabilidad y su impacto académico; además, el camino que está atravesando la disciplina en términos institucionales como en su capacidad explicativa e interpretativa de la realidad política que nos rodea. Por último, destacó que “estamos todos otra vez en el gran salón de la Ciencia Política que congrega a todas las voces, reconociéndonos como parte de una comunidad superior que es heterogénea, pero que sabe que de su pluralidad derivan su riqueza y dinamismo”.